La seguridad empieza por casa, recuerda el Indeci durante la temporada de lluvias
Ante las intensas lluvias que azotan el país y ya han dejado víctimas mortales y cuantiosas pérdidas materiales, la preparación puede marcar la diferencia ante un desastre natural; por ello, resulta indispensable contar con un plan familiar de emergencia porque la seguridad empieza por casa.
El Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) señala que las familias peruanas deben considerar que las emergencias y desastres pueden ser originados por la ocurrencia de fenómenos naturales o inducidos por la acción humana y que no existe lugar libre de estos incidentes.
Las precipitaciones pluviales son recurrentes a escala nacional, sobre todo, entre los meses de diciembre y abril, periodo en el que se intensifican y son más frecuentes, se le denomina ‘temporada de lluvias’. En la actualidad se suma el ciclón Yaku, que se desarrolla frente al mar peruano.
Las lluvias intensas interactúan con las condiciones de la zona, principalmente en quebradas, ríos y laderas de cerros con fuerte pendiente y dan lugar a peligros asociados como movimientos en masa (flujos de lodo, huaicos, deslizamientos, caída de rocas, derrumbes y otros) e inundaciones.
Por ello, se debe estar preparado ante estas situaciones para actuar en salvaguarda de la propia vida y de la vida de sus familiares.
Así, el plan familiar de emergencia es el conjunto de actividades que todos los miembros de una familia deber realizar para estar preparados y responder, de manera organizada, ante una emergencia o desastre.
¿Qué debe considerar el plan familiar?
Debe considerar tres aspectos: preparación ante la ocurrencia de una emergencia o desastre; respuesta, es decir, saber actuar en una emergencia o desastre; y rehabilitación (conjunto de conocimientos y acciones que se deben conocer y ejecutar a continuación de la respuesta).
La herramienta debe contener rutas de evacuación o zonas seguras, puntos de encuentro, designar un responsable de la comunicación con los integrantes de la familia y el combo de la supervivencia que comprende la mochila de emergencia y la caja de reserva.
¿Qué debe contener una mochila de emergencia?
La mochila de emergencias —recuerde colocarla en un lugar de fácil acceso durante la evacuación— debe contener artículos indispensables para que los miembros adultos de la familia puedan sobrevivir las primeras 24 horas después de la emergencia.
Puede ser personalizada con artículos según los requerimientos de cada familia, como la presencia de bebés, niños pequeños, adultos mayores, personas con discapacidad o con determinadas enfermedades.
Los artículos indispensables que debe incluir son: gel antibacterial, papel higiénico, toallas de mano y cara, paquete de paños húmedos, linterna y pilas, radio portátil, silbato, botiquín de primeros auxilios, comida enlatada, paquete de galletas de agua, agua embotellada sin gas, chocolate en barra.
Además, agenda con teléfonos de emergencia, útiles para escribir, manta polar, pantuflas, dinero, bolsas de plástico resistentes, cuchilla multipropósitos, guantes de trabajo, encendedor, cuerda de poliéster, plásticos para piso o techo, cinta adhesiva multiusos, petate y mascarilla.
¿Para qué sirve la caja de reserva?
La caja de reserva debe ser almacenada en un lugar seco y protegido dentro de la casa. Contiene artículos necesarios para que una familia pueda vivir del segundo al cuarto día de la emergencia. La cantidad de artículos dependerá del número de integrantes de la familia; puede ser de cartón corrugado o de plástico.
El plan familiar de emergencia, en suma, servirá para estar preparados y saber responder de manera planificada y organizada ante una situación de emergencia o desastre.