Según la Autoridad Nacional del Agua (ANA), el sector minero emplea aproximadamente el 2% del agua fresca disponible en el Perú. Frente a esta realidad, en el marco del Día Mundial del Agua que se celebra este 22 de marzo, surge una propuesta innovadora que desafía los paradigmas de la minería tradicional y plantea una solución sostenible para la gestión de los recursos hídricos en el sector.
José Salvador Charca Rodríguez, estudiante del tercer ciclo de la carrera de Gestión y Mantenimiento de Maquinaria Industrial en Tecsup sede Arequipa, lidera el proyecto “Minería sin agua”, que combina digitalización, biotecnología y sostenibilidad para optimizar los procesos mineros y mitigar su impacto ambiental.
Puedes ver: Mira la entrevista a José Salvador Charca Rodríguez en Altavoz en Vital FM y Trivu TV.
“Nuestro objetivo principal es implementar un nuevo estilo de trabajo en el sector minero para reducir el consumo del agua”, señala Charca Rodríguez.
Para ello, explica que el proyecto se basa en tres pilares fundamentales:
En primer lugar, la digitalización permite la creación de modelos tridimensionales de minas inteligentes y conectadas, donde se procesan grandes volúmenes de datos que se transforman en inteligencia predictiva. Esto optimiza el uso de los recursos y mejora la eficiencia operativa.
El segundo pilar es la biotecnología, mediante el uso de bacterias especializadas del género Pseudomonas, que facilitan la degradación y separación de los residuos en los relaves mineros. Esto permite la recuperación del agua, la cual es transportada a un sistema de circuito cerrado para su reutilización, eliminando la necesidad de extraer agua fresca.
El tercer pilar es la sostenibilidad, un eje transversal que se potencia gracias a la combinación de la digitalización y la biotecnología. “Queremos demostrar que la minería puede ser más responsable con el medio ambiente y las comunidades. Al recuperar el agua de los relaves, protegemos los ríos, los ecosistemas y a las poblaciones cercanas”, agrega el líder del proyecto.
Los desafíos técnicos y logísticos son parte del proceso de innovación. “Uno de nuestros mayores retos es adaptar el sistema de recuperación de agua para que pueda implementarse sin alterar significativamente los procesos mineros actuales”, explica Charca. No obstante, su equipo está comprometido con la escalabilidad del proyecto, comenzando con operaciones mineras de menor tamaño antes de expandirse a proyectos de gran envergadura.
A futuro, el equipo de “Minería sin agua” aspira a que al menos el 1% de las empresas mineras del país, aproximadamente unas 15 compañías, adopten su tecnología de recuperación de agua. Asimismo, buscan establecer alianzas estratégicas con empresas privadas e instituciones comprometidas con la minería sostenible, permitiendo una mayor implementación de esta solución en la industria.
“Mi iniciativa puede transformar la minería en Perú y otros países al reducir el consumo de agua y la contaminación de relaves. Al recuperar agua con biotecnología, las empresas mineras podrán reutilizar este recurso, minimizando su impacto ambiental y mejorando su relación con las comunidades”, concluye.
Finalmente, el líder del proyecto envía un mensaje a los jóvenes que buscan innovar en sectores tradicionales como la minería: “No tengan miedo de atreverse a innovar. La minería y otras industrias pueden transformarse con tecnología y creatividad. Cada esfuerzo contribuirá a generar un impacto positivo y a desafiar el statu quo. El verdadero cambio comienza con quienes se atreven a salir de lo común”.