El gobierno peruano declaró este lunes estado de emergencia en algunas zonas de la Amazonía, luego de que resultaran afectadas por un derrame de aproximadamente 2.500 barriles de petróleo procedentes del Oleoducto Norperuano, el pasasdo 16 de septiembre.
La medida, anunciada nueve días después del derrame y que regirá durante tres meses, pretende mitigar la contaminación ecológica, recuperar los ecosistemas y proteger la salud de las comunidades locales que se han visto fuertemente afectadas.
Se «ha evidenciado que, de un recorrido de 147,95 km (desde la quebrada Cuninico hasta el río Marañón), se ha afectado un área de 848.400 m2 de cuerpo de agua» y que en esas zonas además «se realiza pesca artesanal», según informó el Ministerio de Medio Ambiente en un comunicado.
Los recursos hídricos comprometidos son la principal fuente de abastecimiento de varias comunidades indígenas locales, por lo que la contaminación las ha dejado sin agua para atender sus necesidades básicas de alimentación y aseo.
«Vamos siete días y no tenemos ninguna novedad favorable a la comunidad por parte del Estado ni por parte de la empresa Petroperú, que solo ha entregado 50 cajas con agua. En Cuninico somos 272 familias, 50 cajas no nos alcanza (…) ¡Siete días sin agua ni comida! Se ha agotado toda la comida que hemos podido tener y ya no tenemos para las ollas comunes», dijo Galo Vásquez, líder de la comunidad Cuninico, en entrevista con un medio local.
* Fuente: BBC