Por Aaron Salomón, entrevista publicada en el diario Expreso.
- Martín Vizcarra ha dicho que no hay testigos de la entrega de un millón de soles en coimas que le hizo Elard Tejeda, exgerente de Obrainsa, a cambio del proyecto Lomas de Ilo, en las oficinas de dicha empresa.
Si eso no existe, no quiere decir que no haya delito. Hay pruebas periféricas: la secretaria, las cámaras de seguridad de Obrainsa y las personas que lo han visto. Es fácil destruir esa tesis con el levantamiento del secreto de las comunicaciones, porque se evidenciará la geolocalización del equipo del señor Vizcarra con el del señor Tejeda. Ahí se determinará que esos equipos estuvieron juntos en las oficinas de Obrainsa.
- Pero algunos afirman que solo se ha avanzado en el 50% del caso, faltando el otro 50%, que sería demostrar que Vizcarra recibió el dinero sucio.
Las viudas de Vizcarra están inventando cualquier cosa, cada vez más surrealista, para negar un hecho tan evidente. Es la doble moral que tiene esta gentuza. Están desesperados porque no saben cómo salvar a su otrora paladín de la justicia, de la dignidad y de la moral, que hoy se encuentra derrotado y menoscabado.
- ¿Es inminente la condena de 15 años de cárcel contra Vizcarra?
Vizcarra sabe que está viviendo sus últimos días en libertad. Las pruebas son contundentes. Este caballero va a terminar preso antes de fin de año o en enero de 2025. Y, como se trata de un delito cometido cuando no era presidente, tendrá que ir a una cárcel común, como Ancón, donde pasará el resto de su vida.
- Y solo nos estamos refiriendo al proyecto Lomas de Ilo, donde está implicada Obrainsa; falta el Hospital de Moquegua, por el que ICCGSA le habría dado 1.2 millones de soles en coimas. En ese caso, el intermediario fue José Manuel Hernández, quien ya ha cantado.
Va a ratificar lo que ya dijo, y también está la declaración del chofer. En ambos casos, hay abundantes medios probatorios que demuestran la culpabilidad de este, a decir de la Fiscalía, delincuente.
- ¿No se salva Vizcarra de ninguna manera, entonces?
Por supuesto que no. Hay que reconocerle un mérito a Germán Juárez Atoche. Si bien se ha demorado, porque en 2020 dijo que iba a pasar a acusación directa, optó por el camino más largo. Pero, bueno, ya estamos en el juicio oral. Unas cinco o seis audiencias más, y le viene la condena a Vizcarra. Por eso me he preocupado de que este señor huya de la justicia. Dada la contundencia de las pruebas, creo que Juárez Atoche debe pedir la variación de las medidas limitativas que tiene.
- ¿Deben pedir prisión preventiva para Vizcarra?
No, estoy en contra de la prisión preventiva. Me diferencio de los parásitos caviares. Debe dictársele una detención domiciliaria, con lo que nos aseguramos de que Vizcarra, en lo que queda de las audiencias del juicio oral, esté sometido a la justicia. Hay que recordar que Vizcarra ha pedido que le anulen la obligación de pedir permiso a un juez para viajar, pero se lo rechazaron. ¡Qué casualidad que se quiera ir al sur!
- Le han dado permiso para ir a Moquegua para fiestas de fin de año.
Cuidado con este viaje, porque se puede fugar. ¿Quién está de presidente en Bolivia? Luis Arce, a quien Vizcarra atendió y permitió disfrutar de una estadía en el Perú, con un pequeño adelanto de la coima de Obrainsa. Vizcarra es astuto. Si no se toma la decisión de variarle la comparecencia con restricciones a una detención domiciliaria, el único responsable de la fuga de Martín Vizcarra será el fiscal Germán Juárez Atoche.
- Moquegua está al lado de Puno, que limita con Bolivia.
Así es. Una cosa más: a Vizcarra, lamentablemente, le corresponde protección de seguridad del Estado. Los efectivos asignados para su seguridad deben ser advertidos de que, en ningún momento, deben dejar a Vizcarra solo, para que no vaya a ocurrir lo mismo que con el exministro Juan Silva, quien se fue a una radio y luego se hizo humo. En el caso del señor Vizcarra, la seguridad asignada debe tener los ojos bien abiertos. Estoy seguro de que Vizcarra se va a querer fugar a Bolivia, desde donde es muy fácil tomar un vuelo a otro destino con mayor protección.
- Entonces, no se le debería permitir que viaje a Moquegua.
Lamentablemente, el juzgado le ha dado un permiso puntual. Pero no estaríamos en este riesgo si Juárez Atoche le pide al juez que le dicte una detención domiciliaria.
- ¿Y cuánto demoraría en resolverse este pedido?
Inmediatamente, unas 48 horas. La condena es inminente; entonces este señor va a querer fugar. Es natural la reacción del ser humano.