Política

Secuestro de Iván Siucho: Revelaciones sobre sus supuestos nexos con el oro ilegal

El testigo clave en la investigación ‘Waykis en la Sombra’, Iván Siucho, narró un dramático suceso ocurrido el viernes 23 de agosto. Según su testimonio ante el Ministerio Público, fue retenido contra su voluntad por dos hombres que se identificaron como policías, en circunstancias que aún no han sido esclarecidas. Este relato se ha convertido en el eje de una investigación que explora la intersección entre actividades delictivas y presuntos vínculos con la minería ilegal.

Según Siucho, el incidente ocurrió en su propia vivienda, donde esperaba recibir a un posible cliente para una reunión de negocios. Días antes, un hombre identificado como ‘Sebastián’ había expresado interés en alquilar maquinaria para la minería. La conversación se desarrolló por varios medios y se acordó que el encuentro sería en la residencia de Siucho. Sin embargo, el día del encuentro, Sebastián no se presentó. En su lugar, llegó un hombre llamado ‘Enrique’, acompañado de Cristian Huamaní, a quien presentó como su padre, junto con otros tres individuos.

Lo que comenzó como una simple reunión de negocios se transformó en una situación aterradora cuando el supuesto padre de Huamaní sacó un arma de un maletín y la apuntó hacia la novia de Siucho, Nicole Graña Martínez, quien estaba presente. Este hecho marcó un giro drástico, pasando de un tono comercial a uno criminal. Siucho relató que la atmósfera se volvió opresiva y violenta, con amenazas directas hacia él y los demás presentes. Además, los hombres comenzaron a interrogarlo sobre su participación en el caso ‘Waykis en la Sombra’, una investigación que vincula presuntas actividades criminales relacionadas con la minería ilegal y el lavado de activos.

“Me dijeron que sabían quién era y que debía guardar silencio si quería salir con vida”, reveló. Siucho confesó a la Fiscalía que temía por su vida y consideraba que este acto de intimidación estaba directamente relacionado con su implicación en el caso, que involucra a figuras importantes, incluyendo allegados de la presidenta Dina Boluarte.

Reacción de la PNP

Mientras el caso sigue bajo investigación, la Policía Nacional del Perú (PNP) afirmó que no existe una conexión directa entre el secuestro de Iván Siucho y el caso ‘Waykis en la Sombra’. El comandante general de la PNP, Víctor Zanabria, declaró a RPP que, según las investigaciones preliminares, el crimen podría estar motivado por razones extorsivas y económicas, posiblemente relacionadas con transacciones vinculadas a la minería.

El comandante Zanabria destacó que la PNP actuó rápidamente tras la denuncia presentada por la familia de Siucho, logrando la detención de cinco civiles y dos efectivos policiales. Los suboficiales implicados, Rolando Castillo Pino y Gabriel Abraham Daniel Neyra Zapata, estaban asignados a la Comisaría de Lince. Según informes, estos agentes participaron activamente en el secuestro de Siucho, un hecho que la PNP calificó como un “acto funcional indebido”. Las investigaciones continúan, y la Fiscalía Penal está llevando a cabo las diligencias pertinentes en la Comisaría de Monterrico, donde inicialmente fueron detenidos los involucrados.

Liberación y consecuencias

Iván Siucho fue liberado en el distrito de San Martín de Porres, en la zona de Eduardo de Habich. Según el comandante Zanabria, los captores llegaron a un acuerdo con Siucho antes de dejarlo en libertad, aunque no se han revelado detalles sobre dicho acuerdo. A pesar de la gravedad de la situación, Siucho no sufrió agresiones físicas, aunque sí fue amenazado con armas de fuego durante su retención. Tampoco se reportó el robo de bienes personales, ya que sus celulares fueron encontrados en su domicilio tras el incidente.

Cinco civiles y dos policías fueron arrestados en relación con el secuestro, y el caso ha generado una serie de interrogantes sobre las conexiones de estos individuos con redes criminales más amplias. Los dos civiles, con antecedentes penales por delitos violentos, fueron vinculados rápidamente con el interés patrimonial que, según las autoridades, motivó el secuestro. La participación de dos agentes policiales en este delito solo ha aumentado la preocupación pública sobre la seguridad y la corrupción dentro de las fuerzas del orden.

Conexiones con la minería ilegal

La figura de Iván Siucho ha estado rodeada de controversia debido a su presunta relación con operaciones ilegales vinculadas al comercio de oro. En octubre de 2022, una investigación periodística reveló que los hermanos Siucho, incluido el cuñado de Edison Flores, estarían involucrados en la minería ilegal y el lavado de activos a través de la empresa Quantico. Esta compañía, fundada por los hermanos Siucho, fue vinculada con actividades mineras no reguladas en regiones del norte y sur del país.

Una pesquisa adicional realizada por la Fiscalía de Lavado de Activos conecta a Martín Siucho, uno de los hermanos de Iván, con la exportación de lingotes de oro supuestamente obtenidos de operaciones ilícitas en Madre de Dios y Piura. Los hermanos habrían utilizado permisos de minería que, aunque formalmente registrados, no correspondían a actividades reales en las zonas mencionadas. Esta maniobra les habría permitido justificar la exportación de oro obtenido de fuentes no declaradas.

Además, durante una intervención policial en la avenida Pablo de Olavide, en Independencia, Francisco y Jaime Siucho fueron sorprendidos portando armas de fuego y realizando maniobras peligrosas en sus vehículos. La intervención reveló la presencia de lingotes de oro en poder de Martín Siucho, lo que intensificó las sospechas sobre su conexión con la minería ilegal. Este hecho ha llevado a una nueva investigación por parte de la Fiscalía.

Los hermanos Siucho han sido señalados como parte de una red conocida como los ‘Siucho-N’, presuntamente vinculada al tráfico de oro y al lavado de dinero. Esta organización habría operado en las sombras de la economía minera, ocultando su participación a través de empresas fachada y aprovechando las debilidades en el proceso de formalización minera en el país.

Documentos obtenidos por un extrabajador de la empresa Quantico fueron entregados a las autoridades, proporcionando indicios sobre las actividades ilícitas que rodean a la familia Siucho. Los testimonios ofrecidos indican que los hermanos no tenían la intención de establecer minas reales, sino que buscaban formas de justificar el oro adquirido de fuentes ilegales.