En el Congreso de la República se presentó un proyecto de ley que busca modificar diversos artículos del Código Penal, a fin de que el uso de réplicas de armas de fuego en la comisión de delitos tenga la misma sanción que en el caso de armas reales.
La iniciativa legislativa es del parlamentario Fernando Rospigliosi (Fuerza Popular) y su finalidad, señala, es dotar a los operadores de justicia de los mecanismos necesarios para la captura, investigación, proceso y sentencia de aquellos individuos que, haciendo uso de dichos elementos en su accionar delictivo, no son perseguidos por ello, al no ser considerado un agravante.
En ese sentido, la fórmula plantea modificar los artículos 46 (literal ‘m’), 124, 170 (numeral 1), 189 (numeral 3), 200 (literal ‘a’), 204 (numeral 1), 317-A y 367 (numeral 1) del Decreto Legislativo 635, Código Penal.
El primero de los cambios que propone es la inclusión, como circunstancia agravante en la comisión de un delito, el uso no solo de armas sino también de réplicas de las mismas.
Asimismo, se plantea que la pena privativa de la libertad por lesiones culposas será no menor de cuatro años ni mayor de seis e inhabilitación, según corresponda, si la lesión se comete usando ya sea un arma de fuego real o una réplica.
También se precisa que los delitos de violación sexual; robo agravado; extorsión; formas agravadas de usurpación; marcaje o reglaje; y las formas agravadas de resistencia y violencia contra la autoridad se pueden configurar mediante el uso de armas reales pero también de réplicas.
Se incluye además una disposición complementaria final en donde se establece que todas las normas conexas al Código Penal deberán adecuarse con arreglo a las modificaciones señaladas.
En la exposición de motivos se señala que, debido a que el uso de armas de juguete o réplicas no son consideras actualmente como un agravante, los delincuentes, aun siendo apresados, son rápidamente puestos en libertad debido a este vacío en la ley.
Asimismo, se explica que, para la víctima del hecho delictivo, es indiferente si el arma es real o réplica, ya que el shock y el trauma producido la afectan igualmente a nivel emocional y psicológico.
«Solo un conocedor de armas de fuego, podría reconocer la diferencia y tomar las acciones defensivas necesarias para repeler el ataque», agrega la propuesta de ley.
