El golpista expresidente Pedro Castillo seguirá cumpliendo prisión preventiva en el penal de Barbadillo, luego que el Poder Judicial rechazara su intento de salir en libertad con una comparecencia con restricciones, bajo una vigilancia electrónica, para haber quebrado el orden constitucional en diciembre de 2022.
La resolución del juez supremo de investigación preparatoria, Juan Carlos Checkley, declaró infundada la solicitud de la defensa de Castillo y dispuso que se mantenga vigente la medida de prisión preventiva, la cual fue prolongada por 18 meses más por la Corte Suprema.
Entre los principales argumentos que esgrimió el magistrado Checkley en su resolución, está que las leyes prevén la medida de supervisión electrónica contra reos en cárcel para eliminar la sobrepoblación en penales hacinados y para casos de delitos con menos de ocho años de prisión como condena.
Al respecto, el juez ponderó que el delito de rebelión que se le imputa al exmandatario tiene penas de entre 10 y 20 años de prisión.
«En ese sentido, no cabe la vigilancia electrónica en el presente caso; más aún cuando el argumento de la defensa es que en el centro penitenciario donde su patrocinado cumple la prisión preventiva (conocido como Barbadillo) es uno en el cual no existe hacinamiento», precisó.
Cabe anotar que el proceso judicial contra Pedro Castillo por el golpe de Estado del 7 de diciembre de 2022 iniciará el próximo 4 de marzo de 2025. La Fiscalía ha solicitado una pena de 34 años de prisión para Castillo, quien es acusado de los delitos de rebelión, abuso de autoridad y perturbación de la tranquilidad pública.
