La nueva evaluación, que ha sido rechazada por el Colegio Médico y diversas facultades de Medicina, y que ahora está bajo la dirección del Ministerio de Salud, implicará un costo millonario. Este costo abarca la contratación de personal, alojamiento y transporte, y será cubierto con fondos públicos.
Uno de los principales argumentos del ministro de Salud, César Vásquez, para justificar que el Minsa asuma la gestión de la nueva prueba para el Servicio Rural y Urbano Marginal de Salud (Serums) es que la Asociación Peruana de Facultades de Medicina (Aspefam) recaudaba S/ 4,000,000 anuales con el Examen Nacional de Medicina (ENAM), lo que él calificó como «un negocio de privados».
«En 2008 se argumentaba que esto se convirtió en un negocio porque al hacerlo obligatorio para el SERUMS y el residentado, todos estaban obligados a pasar por este examen. La recaudación de ASPEFAM se disparó, y lo más preocupante es que no hay claridad sobre el destino de esos fondos, ya que no hay supervisión adecuada», afirmó en una entrevista con RPP Noticias.
Bajo este razonamiento, Vásquez resaltó en diversas entrevistas que la oficialización del Decreto Supremo Nº 013-2024-SA, que revoca el rol de Aspefam en la administración del ENAM y modifica los procedimientos para una nueva prueba para el Serums, permitirá que los futuros médicos no tengan que pagar por la evaluación, beneficiando así a las entidades involucradas.
“La gran diferencia es que, primero, lo administraremos nosotros como órgano rector; segundo, será gratuito, lo cual afecta los intereses económicos de este grupo”, subrayó.
Sin embargo, el concepto de «gratuito» en este contexto es engañoso. El ministro omitió mencionar que la elaboración de la nueva evaluación para el Serums costará S/566,175.00, una suma que provendrá del erario público, es decir, de los impuestos que pagan todos los ciudadanos, según la resolución ministerial Nº 514-2024/MINSA, que implementa el Documento Técnico: Lineamientos para la Evaluación para el Serums.
Este monto, que se detalla en el cuadro adjunto, se destinará al desarrollo de una plataforma digital, gestión logística, adquisición de bienes para la elaboración del examen, contratación de personal para formular las preguntas, así como su traslado, alojamiento y alimentación; además de la publicación y procesamiento de datos.
Miguel Farfán, presidente de Aspefam, recordó en una entrevista con La República que el ministro ha manifestado su disposición a reconsiderar su decisión si las facultades de Medicina dejan de cobrar por el examen. “Pero no está considerando los gastos logísticos y de personal que conlleva el desarrollo de la prueba, que solo al sector le cuesta más de medio millón de soles. Es absurdo, está mal asesorado”, criticó.
El representante de Aspefam también calificó la medida como una “improvisación e irresponsabilidad”, expresando su preocupación por la falta de transparencia en el proceso, señalando que no se ha definido de dónde se obtendrán los fondos necesarios ni quiénes serán los especialistas encargados de desarrollar la nueva evaluación. “¿Cómo es posible formular una prueba tan importante en solo 15 días, cuando está en juego la salud y vida de los peruanos?”, cuestionó.
El nuevo decreto, que ha sido rechazado por facultades de Medicina de universidades como San Marcos y Cayetano Heredia, así como por la Asociación Peruana de Facultades de Medicina, el Colegio Médico del Perú y otras entidades clave del sector salud, elimina el ENAM y asigna al Minsa la responsabilidad de diseñar una nueva evaluación. A partir de ahora, aprobar esta prueba ya no será un requisito para realizar el Serums; solo se necesitará para la asignación de plazas según el orden de méritos.
El ministro César Vásquez explicó en una entrevista con RPP Noticias que los candidatos con mejores calificaciones tendrán prioridad en la selección de las mejores plazas, mientras que aquellos que no aprueben la prueba serán asignados a las plazas disponibles, que en su mayoría están ubicadas en las regiones más pobres y desatendidas.
Cabe destacar que esta evaluación no solo debe ser presentada por egresados de medicina humana, sino también por aquellos de odontología, obstetricia, enfermería, farmacia, bioquímica y nutrición. La nueva evaluación del Minsa está programada para el 1 de septiembre, y en esta fecha los postulantes deberán presentarse para realizar la prueba, siendo asignados directamente a las plazas del Serums 2024-II.
Las entidades que se oponen a esta medida aprobada por el gobierno de Dina Boluarte sostienen que la nueva evaluación del Minsa no cumple con los estándares mínimos de calidad necesarios para garantizar un buen desempeño profesional en el ámbito de la salud, y que además no se ha consultado adecuadamente con los asesores especializados, como Aspefam, la Academia Nacional de Medicina y el Colegio Médico del Perú.
Las críticas también sugieren posibles intereses políticos detrás de esta medida, señalando la alianza entre el gobierno y el líder de Alianza para el Progreso (APP), quien es propietario de la Universidad César Vallejo (UCV). En esta universidad, más del 70% de los estudiantes de Medicina no aprobaron el ENAM. Además, el ministro César Vásquez es miembro del partido político de César Acuña.
La ÚNICA VERDAD es que el los últimos exámenes ENAM los egresados de las “UNIVERSIDADES” de Acuña han desaprobado más del 70% de sus postulantes y es por esto y por orden de Acuña en complicidad de Dina Boluarte nombran a Vásquez quien del partiducho “Alianza Para el Pastel” es cómplice de Acuña y NO LE INTERESA en lo más mínimo la educación ni la salud. Más que favorecer a la mafia antieducacion de las “lavadoras” centros de estudios de Acuña. Esa es la consigna.