Política

Martín Benavides: «No existe ninguna norma hecha para alguna universidad en particular»

Titular de Educación respondió pliego interpelatorio de 33 preguntas formulado por el Congreso

Toda la normativa aprobada por la Sunedu es de carácter general, es decir, aplica a todas las universidades por igual y no existe ninguna hecha para alguna universidad en particular, subrayó hoy el ministro de Educación, Martín Benavides. 

Al responder las preguntas del pliego interpelatorio del Congreso de la República, Benavides comentó que el mejor ejemplo de ello es que, con las mismas reglas de juego y en los mismos períodos de tiempo, hubo universidades que lograron licenciarse y otras que no.

«No existe ninguna norma hecha para alguna universidad en particular. Ello, además de ilegal, sería imposible porque, publicada la norma, se aplica a todos por igual», puntualizó el titular de Educación durante su exposición que fue seguida de manera virtual por el pleno del Parlamento.

El pliego interpelatorio incluyó 33 preguntas relacionadas a las normativas de la Sunedu y al licenciamiento de la Universidad Privada Peruano Alemana (UPAL) y la Universidad Tecnológica del Perú (UTP), en los cuales, según algunos parlamentarios, no se habrían cumplido las exigencias para el licenciamiento.

Benavides recordó que la Ley Universitaria le dio a la Sunedu la responsabilidad de normar las Condiciones Básicas de Calidad (CBC) y el procedimiento; y por eso, dicha entidad aprobó normativas después del 2015 «pero no para generar condiciones de calidad diferentes para unas u otras universidades».

Esta normativa emitida por la Sunedu después de 2015, señaló, fue para agregar universidades al cronograma de solicitudes licenciamiento, culminar el proceso de licenciamiento, ampliar el periodo de adecuación y para promover la simplificación evitando duplicar funciones con otras entidades, pero de ninguna manera para cambiar las CBC. 

En ese aspecto, consideró importante no caer en la “confusión” que han intentado plantear las universidades denegadas, las cuales, apuntó, alegan que fueron evaluadas de manera diferente, lo cual «no es cierto».

Benavides negó cualquier acusación que insinúe algún tipo de parcialidad por parte de la Sunedu porque -señaló- no tiene ningún sustento.

En relación a la UPAL, que carecía de canchas deportivas y por eso alquiló las de un colegio particular, Benavides mencionó que los servicios complementarios de las universidades pueden ser brindados por convenio o contratos por terceros.

También dijo que la Sunedu no autoriza el número de vacantes ofertadas por las universidades y más bien verifica que la capacidad alcance. “La universidad UPAL estaba en capacidad de albergar a los alumnos. La Sunedu constató que el espacio era suficiente para los primeros dos años”.

Rechazó igualmente que haya existido algún vínculo entre la UPAL y el consejo directivo de la Sunedu y refirió que conoce a los directivos de la UPAL Lea Sullmont y León Trahtemberg porque son miembros del Consejo Nacional de Educación (CNE), lo cual, anotó, es público.

Con respecto a la UTP, el ministro mencionó la Sunedu verificó que todos sus locales podían ofrecer los servicios complementarios y también tenían contratos con terceros. Además, dijo, los estados financieros auditados de esta universidad mostraron resultados positivos, «por lo que no se ponía en riesgo su servicio».