En el oscuro telar de la corrupción, emergen las sombras de tres licitaciones marcadas por la opulenta danza de sobornos. «Los Intocables de la Corrupción» desvelan su intrigante narrativa, donde las licitaciones se tejen en el tapiz de la ilegalidad, revelando pagos clandestinos que han permeado las entrañas de la ética pública.
Las sombras de la corrupción se extienden sobre el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), en un caso que involucra al expresidente Martín Vizcarra y una red criminal denominada «Los Intocables de la Corrupción». A partir de las declaraciones de un aspirante a colaborador eficaz y tres testigos protegidos, se han descubierto tres licitaciones plagadas de sobornos.
Las empresas Termirex SAC y Grupo Arcose, ambas vinculadas al empresario Luis Pasapera Andrianzén, se habrían adjudicado las licitaciones Tintay, Pampas y Samegua a cambio del pago de coimas. El modus operandi era simple: una vez recibido el adelanto de la obra, se simulaban compras de materiales de construcción para luego transferir el dinero a empresas fantasma.
El dinero finalmente terminaba en manos de Luis Pasapera, quien presuntamente lo repartía entre Alcides Villafuerte, exfuncionario del MTC, y otros miembros de la red. Las declaraciones de Raúl García, Carlos Carrillo y otros colaboradores confirman este esquema de corrupción.
Las licitaciones bajo sospecha:
- Caso Tintay: Consorcio Tintay (Termirex SAC y Tableros y Puentes SA) – 156,3 millones de soles – Coima: 2,4% del costo directo de la obra (1.922.269,80 soles).
- Caso Pampas: Consorcio Puente del Sur (Termirex y Tableros y Puentes) – 54,2 millones de soles – Coima: 2% del costo de la obra (800.000 soles).
- Caso Samegua: Consorcio Vial Samegua (Imaginación SAC y China Gezhouba Company Limited Sucursal) – 63,5 millones de soles – Coima: 3% del costo de la obra (1,5 millones de soles).
Las conexiones con el caso Puente Tarata:
Los hermanos Pasapera Adrianzén y Alcides Villafuerte también están involucrados en el caso Puente Tarata, donde se investigan presuntos pagos de sobornos durante el gobierno de Pedro Castillo. Esta red de corrupción parece extenderse más allá de un solo gobierno, poniendo en tela de juicio la transparencia y la ética en la gestión pública.
Un caso que exige justicia:
Las pruebas y testimonios recopilados hasta el momento dibujan un panorama desolador de la corrupción en el MTC. Es necesario que las investigaciones continúen y que los responsables sean sancionados con todo el peso de la ley. La sociedad peruana no puede tolerar más actos de corrupción que socavan las bases de la democracia y el desarrollo del país.
