En una movida que ha encendido el debate, el congresista Luis Aragón, de Acción Popular, ha propuesto un proyecto de ley para casi duplicar el número de parlamentarios, llevando la cifra hasta 250, frente a los 130 actuales elegidos en 2021. La propuesta, que ya está en manos de la Comisión de Constitución y Reglamento, encabezada por Fernando Rospigliosi de Fuerza Popular, podría aprobarse en los próximos días, aunque no entraría en vigencia sino hasta 2031.
Este extenso plazo se debe a que, en las elecciones de 2026, el Congreso pasaría a tener 190 escaños, distribuidos en 60 senadores y 130 diputados, siendo una de las reformas más importantes de los últimos años en términos de representación.
Patricia Juárez, vicepresidenta del Congreso, ha salido en defensa de la medida, alegando que «hay una crisis de representación» y recordando que, en el pasado, el número de legisladores era significativamente mayor. «No podemos negar que estamos subrepresentados», declaró, en un esfuerzo por justificar el cambio que, sin embargo, despierta escepticismo en la ciudadanía.
Para Eduardo Herrera, de la Defensoría Nacional Anticorrupción, el problema no radica en la idea de aumentar la representación, sino en que viene de un Congreso profundamente impopular. «Aumentar el número de parlamentarios en este contexto parece una burla; la ciudadanía percibe que muchos de estos legisladores se representan a sí mismos y no al pueblo», señaló en una entrevista.
Este descontento no es nuevo. Una encuesta reciente del Instituto de Estudios Peruanos (IEP) muestra que el 92 % de los peruanos desaprueba la gestión del Congreso. Mientras tanto, en una coyuntura de gran tensión, el Congreso ha programado su semana de representación para mediados de noviembre, en coincidencia con el paro nacional de transportistas y la cumbre del APEC, lo que promete ser un escenario aún más desafiante. Giovanni Diez, de la Unión de Gremios de Transporte Multimodal del Perú, confirmó la participación de diversas asociaciones civiles, haciendo de esta movilización una expresión de descontento que irá más allá de un solo gremio.