Hoy podemos vislumbrar que tenemos a un presidente mitómano en el poder
El presidente Francisco Sagasti poco a poco está perdiendo la calma y viene dando declaraciones a la prensa en tono desafiante y niega todo lo que hoy está saliendo a la luz. Esa conducta embustera es muy conocida en Martín Vizcarra; sin embargo, no la esperábamos del señor Sagasti.
Así las cosas, otras personas que ya se están involucrando en los trámites para la adquisición de vacunas del exterior, lo están desenmascarando, como es el caso del empresario y director de la Asociación de Propietarios de Ómnibus Interprovinciales del Perú, Luis Miguel Ccicia, que anunció que su gremio ya adquirió 100 mil vacunas rusas y que en 15 días llegaría el primer lote.
Es decir, con esta noticia podemos confirmar que los privados sí pueden realizar negociaciones con laboratorios que producen vacunas; sin embargo, Sagasti continúa mintiendo al país, porque lo sigue negando y se resiste a reconocerlo, e incluso pretendió desestimar lo que dijo el empresario transportista, arguyendo que eso es imposible por los tramites de las certificaciones y porque esas dosis no habrían superado los registros sanitarios:
“En este momento ya estamos con 48 millones de dosis, estamos negociando por aproximadamente otros 40 millones de dosis más, lo que pueda aportar el sector privado, mediante la compra de vacunas, no ayudaría en gran medida, además de los problemas que tiene el proceso de compra de vacunas. Cada contrato de vacunas requiere la participación de especialistas en salud, economía, asuntos legales, una coordinación entre ellos. Es muy difícil toda esa capacidad de negociación que se requiere para negociar con éxito y con seguridad, evitando cualquier acción indebida, lo que se requiere en términos de capacidad es muy grande”, refirió ayer en el Hospital Militar, luego de inocularse la segunda dosis de la vacuna.
«Es algo que sencillamente no encaja dentro el proceso de vacunación” y apenas añadió que la única forma de ayudar de parte de los empresarios, es en el aspecto logístico y en la aplicación de la vacuna, tal como lo repitió la presidenta de Confiep María Isabel León, luego de salir de su reunión con el mandatario en Palacio de Gobierno. Ella, adoptando un papel de ventrílocua aseveró que los privados no deberán negociar vacunas hasta el tercer trimestre de este año; evidentemente, después que el gobierno lo haya realizado.
Asimismo, quien también desmintió al jefe de Estado, es el embajador de Rusia en Perú Igor V. Romanchenko, que afirmó que desde agosto del 2020 ellos han estado negociando con Perú, pero el Estado peruano hasta el momento no ha concretado, ni firmado la compra:
“La entidad encargada de la venta y suministro de la vacuna de rusa es el fondo estatal de inversión directo de Rusia; desde agosto pasado este fondo está llevando a cabo las negociaciones con el ministerio de Salud y la cancillería del Perú sobre el suministro acá de 20 millones de dosis. Su precio como se sabe no supera los 10 dólares por una dosis; el fondo está autorizado a negociar tanto a nivel de Estado central, como con los gobiernos locales y la empresa privada, esto depende totalmente de las decisiones que tome al respecto el gobierno peruano.
Repito que todo esto depende del gobierno del Perú; el Sputnik V tiene una buena logística, es accesible, fácil de transportar y almacenar, temperatura de 2 a 8 grados sobre cero, un buen ejemplo de estas capacidades es el caso de México, a inicios de febrero se aprobó la vacuna y en las tres semanas ya llegó el primer avión con el lote de 200 mil dosis. La vacuna es buena, el precio es bueno, lo que falta es firmar.”
Hoy podemos corroborar que Francisco Sagasti ha mentido al país, así como mintió cuando aseguró que el Estado no puede realizar contratos de adquisición de vacunas con intermediarios y justamente, ayer en un reportaje televisivo el periodista Beto Ortiz mostró el contrato realizado por el Estado peruano con laboratorios Sinopharm y en él se señala que las negociaciones se realizaron con dos intermediarios, además del laboratorio chino. Eso nos demuestra las mentiras de Sagasti ceñidas al fiel estilo de Martín Vizcarra.
¿Por qué el gobierno morado se empecina en defender la “negociación” con Sinopharm sin dar opción a los privados?
Hoy podemos entender por qué la Digemid rechazó 5 veces el registro de vacunas Sputnik. Realmente todo un escándalo; y ahora Sagasti se escuda en esta dirección general de medicamentos para evitar que los privados puedan traer vacunas para salvar las vidas de sus trabajadores.
No obstante, la verdad… poco a poco se viene revelando y a pesar que este gobierno no dé muestras de transparencia y aunque se hayan burlado de la opinión pública con un falaz informe Carbone, los próximos días serán cruciales para desentrañar parte de este “misterio”.
Tomado de Lima Gris. Ver el artículo original aquí
Fuente: Willax 😁