Hace unos días se viralizó en las redes un video en el cual una muchacha, supuestamente de Villa El Salvador, entre gritos y lágrimas exigía tener los mismos derechos y oportunidades que los jóvenes de Miraflores, reclamando al país que la derecha había tenido 200 años de oportunidades para cambiar las cosas y que no lo había hecho, y al final pide no votar por Keiko Fujimori.
Poco después de la difusión de este video, se descubrió que esta muchacha de Villa El Salvador, en realidad era de San Borja, hija de un cineasta de nombre Javier Sebastián García, gerente general de la productora Kaballo de Fuego HD. Esta empresa de cortometrajes, es proveedora del Estado, principalmente del Ministerio de Educación, al cual factura cientos de miles de soles para producir videos institucionales.
Lo interesante de este video, es que nos quieren convencer que todos nuestros males (como por ejemplo que las grandes empresas no paguen impuestos, que los bancos cobren altos intereses, que no haya oxígeno en los hospitales, que la educación no tenga la misma calidad en una escuela de Villa El Salvador que en Miraflores) son producto del modelo económico neoliberal que tenemos y de la derecha.
Los problemas que tenemos en el país, no son culpa de la derecha (que no ha gobernado durante los últimos 200 años) ni del modelo económico neoliberal (que más bien tenemos un modelo de Estado altamente regulador y burocrático) sino que afirmo sin miedo a equivocarme, que la gran mayoría de problemas se deben a la mala gestión de nuestras autoridades, la mayoría de ellas de izquierda.
Para resumir los últimos 50 años, tenemos que empezar con los 12 años de gobierno militar izquierdista del general Velasco. Fue un gobierno nefasto de izquierda con la reforma agraria donde se expropiaron miles de haciendas. Se expropiaron los medios de comunicación, se nacionalizaron las empresas que explotaban los recursos naturales, se prohibieron las importaciones, se prohibió el uso del dólar, se crearon miles de empresas públicas, etc.
Luego vino el gobierno de Fernando Belaunde. Un gobierno de centro, que poco pudo hacer ante el naciente fenómeno del terrorismo de Sendero Luminoso. Belaunde devolvió los medios de comunicación a sus verdaderos dueños y trató de reinsertar al Perú en la democracia. Sin embargo, no dio marcha atrás en la reforma agraria, ni privatizó las miles de empresas públicas deficitarias entre muchas otras medidas necesarias.
Los izquierdistas no pretenderán decirnos que el primer gobierno de Alan García fue de derecha, con los controles de precios, controles de cambio, la estatización de la banca, entre muchas otras medidas populistas de su gobierno izquierdista que hundieron al país en la peor híper inflación de nuestra historia.
Algunos dirán que los once años de gobierno de Alberto Fujimori, sí fueron de derecha, e implantaron el modelo económico neoliberal. Coincido que las medidas que tomó Fujimori en los primeros años de gobierno, como liberalizar el tipo de cambio, reducir los impuestos a las importaciones, privatizar cientos de empresas públicas, establecer el modelo de las AFP entre otras medidas; son políticas de derecha, pero les recuerdo que el Perú era un Estado quebrado y que no había más opción que tomar medidas drásticas para salvar al país de la catástrofe que estábamos viviendo. Pero Fujimori no terminó de implementar un modelo de economía de libre mercado y nos dejó una mezcla de políticas liberales con un estado burocrático e ineficiente.
Durante los últimos 20 años, los izquierdistas desde la sombra, han dado marcha atrás a muchas de las políticas de libre mercado. Si bien en los gobiernos de Toledo, García y Humala se mantuvo el modelo macro económico de responsabilidad fiscal que ha traído estabilidad y progreso al país, poco a poco el Estado se volvió más grande, más regulador y más intervencionista en la economía. Los índices de crecimiento fueron disminuyendo progresivamente y el modelo económico neoliberal más se parecía a un ciego, manco y cojo que trata de avanzar ante las zancadillas de los rojos. Ahora ya sabemos que su motivación era echarle la culpa de la pobreza al modelo económico.
Cuando finalmente es elegido un gobierno de derecha, como el de PPK, solo duró en el poder un año y medio con una gran muestra de ineptitud (lo digo con pena) para luego ser reemplazado por el gobierno izquierdista de Vizcarra.
Ya vemos que la derecha no ha gobernado al país durante los últimos años, al contrario, más han sido los gobiernos de izquierda que derecha. El modelo neoliberal que tanto critican, nos ha permitido sacar de la pobreza a millones de peruanos en los últimos 20 años. La pobreza se redujo del 55% a 20% de la población, sacando a 7 millones de peruanos de esta penosa situación. El gran problema del país es la ineficiencia y la corrupción de las autoridades sobre todo locales y regionales.
Como gran parte de la población no recibe los beneficios del modelo económico, le echa la culpa al modelo cuando la responsabilidad es de sus propias autoridades. Usemos como ejemplo, el caso de Cajamarca (tierra del profesor Castillo). Desde el 2010 al 2017 recibieron en transferencias directas del gobierno central 10,841 millones de soles, de los cuales 2,860 millones correspondían al canon minero. Con esa montaña de millones de soles, Cajamarca debería estar entre los departamentos más ricos del país, en lugar de los más pobres. ¿Quiénes fueron sus autoridades en ese periodo? Nada menos que el profesor izquierdista Gregorio Santos condenado en el 2020 por corrupción.
Usemos como otro ejemplo el caso de Junín. Durante el periodo 2011 al 2014, el gobierno regional de Junín recibió 720 millones de soles en transferencias directas por canon y regalías. Durante esos mismos años, la prevalencia de desnutrición crónica en los niños fue en promedio 24.34%. ¿Quién estuvo a la cabeza del gobierno regional de Junín durante ese periodo? Nada menos que Vladimir Cerrón, del partido marxista, leninista: Perú Libre. Cerrón ha sido condenado por corrupción en una obra de saneamiento en La Oroya. Además de este proceso, Cerrón afronta 9 acusaciones penales adicionales todas por corrupción durante su paso por la presidencia del gobierno regional de Junín. Los delitos que se le imputan son: malversación de fondos, colusión, peculado, aprovechamiento indebido del cargo y defraudación patrimonial.
Así que la próxima vez que los partidos de izquierda nos quieran hacer el cuento que el problema del Perú es el modelo económico neoliberal, ya sabemos que lo único que buscan es esconder su ineptitud y corrupción.
Como decía Paulo Coelho: “Cuando un político de izquierda dice que acabará con la pobreza, se refiere a la suya”.
* Tomado de Cafe Viena. Reproducido con autorización