No perdieron el tiempo y aprovecharon de colocar su propia bandera en el satélite natural.
El pasado domingo China batió varios de sus récord. Y es que la sonda Chang’e-6 logró alunizar correctamente en la cara oculta de la Luna, un logro que forma parte de la segunda misión de retorno de muestras a la Tierra por parte de este país, siguiendo los pasos de Chang’e-5, que trajo a nuestro planeta 1,73 kilos de material lunar en 2020. Eso sí, esta hazaña no fue logro sólo de la nación asiática, pues se trató de una colaboración internacional que también incluyó a equipos de la Agencia Espacial Europea, Francia, Italia y Pakistán.
De esta forma, pasados unos días desde su llegada al satélite natural, los medios chinos ya comparten las primeras imágenes capturadas en el lado oculto de la Luna, despejando dudas sobre cómo es y mostrándonos la realidad de aquella región hasta ahora desconocida.
Las primeras imágenes de Chang’e-6
El programa de exploración lunar de China es ambicioso, y bastante. ¿Su último esfuerzo? Lanzar Chang’e-6 a bordo de un cohete Long March 5 el pasado 3 de mayo, que logró un aterrizaje exitoso en la Cuenca Aitken del polo sur lunar, un vasto cráter lunar, con el fin de recolectar – con un brazo robótico y un taladro – cerca de dos kilos de muestras lunares para ser analizados en la Tierra.
Así, el último trascendido fue que la Administración Nacional del Espacio de China (CNSA) confirmara que la sonda completó su misión de recolección, despegando de la superficie lunar en la madrugada del martes, y situándose ahora en órbita lunar hasta nuevo aviso. Desde allí se estima que realizará algunas maniobras antes de su regreso al planeta, previsto para el final de junio.
El lado oculto de la Luna, visible sólo desde el espacio y no desde la Tierra debido a la rotación sincrónica del satélite con nuestro planeta, es un claro objeto de fascinación y especulación por parte de la comunidad científica. Y si bien no sabemos mucho de dicha región, ha sido China la principal nación dedicada a estudiarla.
Recordemos que Chang’e-6 no es la primera misión que China envía a esta parte de la Luna, ya que en 2018, la misión Chang’e-4 exploró inicialmente este territorio. Y luego, su sucesora Chang’e-5 se dedicó a explorar Mons Rümker, una llanura volcánica ubicada en una región conocida como el Océano de las Tormentas.
Ahora, el análisis de las muestras traídas por Chang’e-6 será de gran valor para estudiar la formación y evolución histórica de la Luna, e incluso nos podría ayudar a saber más sobre el origen del sistema solar.
Con todo, cabe destacar que la misión no sólo fue histórica por su recolección o si exitoso aterrizaje. Según compartieron medios locales, la sonda aprovechó su momento ahí para desplegar la bandera de China por primera vez en el lado oculto de la Luna, algo que quedará escrito en la historia de la exploración espacial del país asiático.
