La muerte de Jaime Chincha, periodista de 48 años, fue confirmada el domingo 7 de setiembre por el médico Dacio Félix Maldonado Bravo, inicialmente identificado como médico de cabecera, quien determinó una “insuficiencia cardiaca no especificada” como causa oficial de defunción. Sin embargo, la Policía Nacional del Perú (PNP), a través de un comunicado institucional, informó posteriormente que el certificado de defunción fue expedido de manera irregular.
De acuerdo con la versión policial, el doctor de 87 años admitió no conocer personalmente al hombre de prensa, no ser su médico tratante ni haber acudido al domicilio para certificar el fallecimiento. «Reconoció haber extendido el certificado a solicitud de un familiar, a través de una agencia funeraria», se lee.
Ante esta irregularidad, la PNP notificó inmediatamente al Ministerio Público, solicitando la intervención fiscal para el levantamiento del cadáver y el traslado al Instituto de Medicina Legal, así como la práctica de una necropsia de ley, que permitiría determinar científicamente la causa de la muerte. La solicitud buscaba asegurar el cumplimiento de los procedimientos médico-legales y despejar cualquier duda sobre las circunstancias del deceso del comunicador.
No obstante, informaron que el Ministerio Público, en una decisión adoptada mediante la Disposición Fiscal N.° 02 del 8 de setiembre, resolvió no iniciar investigación preliminar sobre el fallecimiento de Chincha y descartó la realización del levantamiento de cadáver y la necropsia, pese a las advertencias de la Policía Nacional sobre la certificación del deceso y las posibles consecuencias legales de dicha omisión.