Lima Norte contará por primera vez con una planta desaladora que convertirá agua de mar en agua potable. La infraestructura se ubicará en Ancón y forma parte del proyecto de captación, producción y transporte de agua impulsado por Proinversión, en coordinación con Sedapal, para reforzar el abastecimiento en esta zona de la capital.
El Ministerio de Vivienda aprobó la iniciativa bajo la modalidad de Asociación Público-Privada (APP) autofinanciada, lo que significa que la inversión, estimada en US$ 204.77 millones, será asumida íntegramente por el sector privado, sin comprometer recursos del Estado.
La planta producirá 86,400 metros cúbicos de agua potable al día, lo que permitirá cerrar una de las brechas hídricas más críticas de Lima. Con ello, más de 570 mil vecinos de Ancón, Santa Rosa y Ventanilla —distritos donde muchas familias solo reciben agua una vez al día— podrán acceder a un suministro seguro y continuo.
Además, el proyecto dotará de agua al futuro Parque Industrial de Ancón, que busca consolidarse como un nuevo polo de desarrollo económico en la capital.
“Estos megaproyectos marcan un hito porque atraen inversiones de gran escala y mejoran la calidad de vida de los peruanos”, señaló Luis Del Carpio, director ejecutivo de Proinversión.
La obra contempla sistemas de transporte, estaciones de bombeo, redes y mecanismos de control de calidad con estándares internacionales, asegurando operación eficiente incluso frente a sequías, huaicos u otros eventos climáticos.
Con este proyecto, Proinversión reafirma su compromiso de impulsar APP sostenibles e innovadoras que permitan cerrar brechas en infraestructura y servicios públicos esenciales.