Costa central acumula mayor energía y solo será liberada con gran movimiento telúrico, señala IGP
El Perú es un país altamente sísmico, lo cual significa que ninguna ciudad está libre de un sismo fuerte o moderado. El pasado 28 de junio le tocó a Arequipa con una magnitud 7 y daños relativamente menores. Pero ¿qué pasa con Lima?, donde hay un largo silencio sísmico y muchas construcciones informales.
De acuerdo con Hernando Tavera, jefe del Instituto Geofísico del Perú (IGP), en la costa central del país ocurre el choque de las placas de Nazca y Sudamericana, lo que ha generado en el tiempo una alta actividad sísmica. Una prueba de ello ha sido el terremoto de Pisco del 2007 con una magnitud 7.9.
«Esa frecuencia de sismos nos ha permitido investigar y llegar a la conclusión de que existe la probabilidad de que, frente a la costa de Lima, pueda ocurrir en algún momento un sismo de magnitud elevada; por eso en los simulacros ensayamos sismos de magnitud 8.8«, comentó a la agencia Andina.
Tavera recordó que el sismo más grande que se ha dado en la costa central peruana ocurrió en el año 1746 con magnitud entre 8.8 y 9 y, desde entonces, no hubo otro de magnitud elevada. Por tanto hay 278 años de acumulación de energía que solo se liberará con un sismo de más de 8 de magnitud.
Advirtió que una mirada rápida de cómo están construidas las viviendas en Lima, nos dan una idea de qué podría ocurrir ante un fuerte temblor en la capital. «Cuando ocurre un sismo, el suelo se sacude por distintos lados o niveles de intensidad y, si las viviendas no son capaces de soportar, pueden colapsar«.
Mapa de Acoplamiento Sísmico
El Instituto Geofísico del Perú (IGP) ha elaborado un Mapa de Acoplamiento Sísmico, en el cual se muestran las áreas del país donde se está acumulando «deformación» y donde, en el futuro, la energía se liberará con sismos de gran magnitud.
En la costa central del Perú, que incluye a Lima, se está acumulando deformación desde hace 278 años. Según Tavera, no solo la costa de Lima sufriría sismos de gran tamaño sino que también están en riesgo Ancash, Ica, Arequipa, Moquegua y Tacna, lugares para los que se pronostica sismos con magnitudes cercanas a 8.
«Somos un país altamente sísmico, y tenemos que entender que los sismos simplemente ocurren cuando tienen que ocurrir y tenemos que estar siempre preparados«.
El acoplamiento sísmico, explicó, se da cuando las placas tectónicas (Nazca y Continental) no pueden desplazarse normalmente y forman protuberancias que, con el tiempo, tratan de liberarse de alguna manera, provocando movimientos telúricos de diferentes proporciones.
“Cuando las placas tectónicas tienen dificultades en su desplazamiento y empiezan a deformarse y retroceder, ocurre un acoplamiento y allí se forman protuberancias. Entonces, tiene que existir un mayor esfuerzo para vencer esas resistencias y es allí cuando se producirían los próximos sismos de magnitud”, dijo Tavera.
Agregó que los sismos son cíclicos en el tiempo y es de esperarse que las zonas afectadas por terremotos en el pasado se vean nuevamente perjudicadas por eventos de igual o mayor magnitud, dependiendo de la acumulación de energía por liberar.
El titular del IGP indicó que en el Perú está en marcha el proyecto de Sistema de Alerta Sísmica, que ayudará a dar la señal de alerta a la población en caso de sismo. Este sistema, que entró en funcionamiento en el 2020, podría estar terminado en mayo del 2024 luego de las pruebas y evaluaciones respectivas.
“Cuando ocurra el sismo, vamos a poder dar una alerta inmediata a las zonas urbanas. Las ondas de comunicación viajan a velocidades mayores a 300 kilómetros por segundo y las ondas de los sismos viajan a 6 kilómetros por segundo. Esa diferencia de velocidad es la que estamos utilizando para alertar a la población, es decir, nos da una ventaja de unos 10 segundos para que la gente se proteja”, manifestó.
Cabe indicar que el sistema no predice la ocurrencia de un sismo sino que, ocurrido un movimiento telúrico de gran magnitud, alerta con segundos de anticipación el momento que el área urbana será sacudida por las ondas sísmicas.
«Si el sistema de alerta hubiera funcionado en el terremoto de Pisco del 2007, la alerta para Lima hubiera llegado 40 segundos antes. Es como un aviso de que están en camino ondas sísmicas que sacudirán el suelo y eso ayuda a que la gente se ponga a buen recaudo«.
Tavera dijo además que los terremotos son parte del proceso evolutivo del planeta y que la población debe entenderlos de esa manera para estar preparados, por ejemplo, participando activamente en los simulacros organizados por Defensa Civil.
Frente a un sismo
Ante un sismo, el IGP y Defensa Civil recomiendan a las personas ubicarse en las zonas seguras internas, verificando que sean accesibles, iluminadas y sin obstáculos. Practica agacharte, cubrirte o sujetarte para prepararte ante grandes sismos.
Si no podemos agacharnos, bajemos lo más que podamos y mantengámonos lejos de ventanas u objetos que nos puedan caer encima. Protejamos nuestra cabeza y cuello con los brazos. Además, revisa con toda tu familia los artículos de sus mochilas para emergencias. Si no las tienen, prepárenlas de acuerdo con sus necesidades.