El dengue es una enfermedad que, de tratarse adecuadamente, tiene cura; sin embargo, existen algunos casos en los que puede complicarse y llevar al paciente a la muerte. ¿A qué se debe esto? El doctor Manuel Espinoza, infectólogo del Instituto Nacional de Salud (INS), lo explica.
En el programa Andina al Día, el médico señaló que algunos factores de riesgo que podrían agravar la enfermedad y conducir a un desenlace mortal son presentar comorbilidad (coexistencia de dos o más enfermedades), ser adulto mayor, ser gestante o menor de dos años, o haberse infectado con dengue anteriormente.
“Existen factores que pueden llevar a que el dengue se complique, lo cual provocaría una falla orgánica múltiple y, en consecuencia, la muerte. Entre están ser adulto mayor, niños menores de dos años, mujeres embarazadas, diabéticos, hipertensos, personas con insuficiencia renal crónica, obesidad, o haber tenido dengue en el pasado”.
De cada diez personas que se contagian con el virus, solo dos o tres manifestarán algún tipo de enfermedad por dengue y, de este grupo, menos del 10 % presentará un signo de alarma o dengue grave.
Cuando existe dengue grave, apuntó, se registra una hemorragia masiva, sobre todo de las mucosas, lo cual conduce a una falla de los pulmones, riñones, hígado y finalmente, del corazón.
De acuerdo con el especialista, la enfermedad suele manifestarse entre los 2 y 7 días y, en algunos casos, hasta 15 días después. En cuanto a la fase crítica, ésta no dura más de 48 horas, para luego pasar a la etapa de convalecencia, de no existir ninguna complicación.
¿Qué es el dengue?
El dengue es una enfermedad transmitida por la picadura del Aedes Aegypti hembra, zancudo que también transmite el zika y la chikungunya. Generalmente está presente en las zonas calurosas y tropicales, como en la costa norte y la Selva, pero también aparece en lugares que sufrieron inundaciones o caída de huaicos.
¿Cómo identificar al mosquito del dengue?
Este insecto es negro con manchas o anillos blancos en el dorso y en las patas. Mide aproximadamente 5 mm, y pica durante el día en sombra o en áreas protegidas de la luz solar directa.
El zancudo coloca sus huevos en las paredes de los recipientes con agua (tazones, baldes, floreros, macetas); allí se transforman en larvas, luego en pupas y finalmente en mosquitos. Por lo general, el huevo demora de 8 a 10 días hasta convertirse en adulto.
¿Cómo me puedo contagiar?
Esta enfermedad se transmite cuando el mosquito se alimenta con sangre de una persona enferma de dengue y luego pica a otras. Estos insectos pueden picar durante todo el día, pero de preferencia lo hacen en las mañanas y en el inicio de la noche. No existe contagio de esta enfermedad de persona a persona.
¿Cuáles con los síntomas?
La persona enferma con dengue clásico presenta náuseas, vómitos, sarpullido, dolor en los ojos (generalmente detrás de ellos), dolor muscular, dolor en las articulaciones o dolor en los huesos.
Sin embargo, también existe el dengue grave, cuyos síntomas son dolor estomacal intenso y constante, dolor torácico, vómitos persistentes, sangrado en las encías, en la orina y moretones en la piel. En ambos casos, el paciente debe acudir inmediatamente al centro médico para su tratamiento.
¿Cuidados para no contraer este virus?
Las personas deben identificar los depósitos que pueden ser criaderos del mosquito, como cilindros, bidones, tanques, botellas y floreros; así como objetos inservibles (llantas, plásticos, etc.) porque, con la acumulación del agua, la hembra del zancudo puede depositar los huevos y reproducirse. La única manera de prevenir es cepillando las paredes de estos depósitos, taparlos adecuadamente y eliminar y destruir lo que no sirve.
¿Qué otros cuidados deben adoptarse en casa?
Se debe utilizar repelentes en las áreas del cuerpo que están descubiertas. También es importante usar camisas de manga larga y pantalones largos para evitar la picadura del mosquito.
Es necesario emplear mosquiteros o toldillos en las camas, sobre todo cuando hay pacientes enfermos, para evitar que infecten nuevos mosquitos o en los lugares donde duermen los niños.