Un grupo de arqueólogos desenterró tres tumbas de la dinastía Han con 1.800 años de edad. Encontraron ahí abajo un vehículo inesperado.
Tras siglos, milenios literalmente, de olvido, un equipo de arqueólogos desenterró un conjunto de tres tumbas de la dinastía Han en la ciudad china de Rizhao. Las tumbas, que datan de hace 1.800 años, pertenecían a una antigua familia y contenían una gran cantidad de tesoros, incluyendo una espada de hierro, espejos de bronce y cerámica, entre otros tesoros dignos de estudios más profundo por parte de la comunidad dedicada a esta labor.
Las tumbas, de acuerdo con un reporte del Institute of Archaeology at the Chinese Academy of Social Sciences, fueron descubiertas durante la expansión de un parque local, descubriendo que por el paso del tiempo las tres construcciones se encontraban parcialmente dañadas.
Lo curioso aquí es que a pesar del saqueo en dos de las tumbas, la tercera se conservó en un estado excepcionalmente bueno, revelando detalles únicos sobre la vida y las costumbres de la familia durante la dinastía Han.
Una tumba que parecía una casa: así es la construcción de la dinastía Han
Las tres tumbas, de acuerdo con lo que reporta el Yahoo! News, fueron construidas con un estilo similar, presentaban pasillos inclinados que conducían a las entradas. Dos de las tumbas, de hecho, tenían inscripciones con el mismo apellido, Huan, lo que indica que el complejo probablemente pertenecía a una familia con bastante dinero, al menos para los parámetros de hace casi dos mil años en esa zona de Asia.
Los arqueólogos encontraron que había dos habitaciones conectadas con ventanas y puertas en miniatura en la cámara funeraria principal de la tercera tumba, conocida como M3. Este estilo residencial sugiere que la tumba contenía a un marido y una mujer, una pareja conyugal. Pero todo esto es una mera suposición.
La buena noticia es que a pesar del saqueo en dos de las tumbas, la tumba M3 se mantuvo intacta, revelando un tesoro de artefactos. Entre los objetos encontrados se encuentran una espada de hierro, cerámica de diversos tipos, vasijas y los restos de un carruaje utilizado para transportar el ataúd.
El carruaje, descrito como exquisitamente elaborado, es un hallazgo poco común que proporciona información valiosa sobre las prácticas funerarias de la época, ya que anteriormente no se había documentado sobre su uso en este tipo de rituales mortuorios.
Un legado que marca alguna bases para el estudio arqueológico
En razón de todo lo anterior descrito sería válido afirmar que el descubrimiento de las tumbas familiares de la dinastía Han puede ser considerado un hallazgo significativo e importante por parte de los arqueólogos.
La presencia del mismo apellido en varias tumbas es un hecho poco común que aporta información sobre la estructura familiar y social durante la dinastía Han, pero todavía quedarían muchos detalles por conocer o conectar sobre lo descubierto en el sitio.
La excavación comenzó en diciembre de 2023 y finalizó apenas en enero de 2024, con un equipo de arqueólogos y expertos que viajaron a a la ciudad costera en la provincia de Shandong, en el este de China para desenterrar y catalogar todos los objetos encontrados.
A menos de seis meses de cerrar el proceso de excavación y recolección estamos presenciando apenas los primeros avances del proyecto.