Afirmó que han comprobado que la vacuna puede combatir todas las cepas del covid-19 existentes en el mundo
La vacuna del laboratorio chino Sinovac, una de las más avanzadas del mundo, podrá aplicarse masivamente a principios del próximo año, dijo hoy el presidente de la farmacéutica, Yin Weidong, quien aseguró que tienen capacidad para fabricar cerca de 300 millones de dosis al año.
Producción a buen ritmo
«La línea de producción es muy importante, no solo la investigación y el trabajo en laboratorio», afirmó el presidente de Sinovac y explicó que, al principio, pensaban fabricarla solo para China, pero con el avance de la pandemia pensaron que era necesario intentar producir para más países.
Respecto a la cooperación con Brasil, concretamente con el instituto brasileño Butantan, con sede en Sao Paulo, Yin dijo que prevén facilitarle el producto semifinalizado y allí se encargarían de su conclusión y embalaje, de forma que puedan proporcionar vacunas completas a otros países latinoamericanos.
«La calidad de la vacuna es estable, lo que la hace muy eficaz», dijo y se mostró confiado en que la efectividad de la CoronaVac supere ampliamente el estándar del 50 por ciento establecido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para la covid-19. Asimismo, afirmó que han comprobado que la vacuna de Sinovac puede combatir «todas las cepas de SARS-CoV-2 existentes en el mundo» y sus diferentes variantes.
Pruebas finales
CoronaVac se está probando en la fase 3 de ensayos clínicos con voluntarios de cuatro países: Brasil, Turquía, Bangladesh e Indonesia. También se ensaya con cerca de 10.000 voluntarios en China y se ha utilizado en el programa de vacunación de emergencia para personal sanitario y de otros sectores puesto en marcha en julio por el Gobierno de Pekín.
«Es mejor hacer los test en el exterior porque en China la pandemia está prácticamente controlada y resulta más difícil probar su efectividad aquí», explicó Yin. El aumento de la producción es una de las claves para Sinovac, ya que con su capacidad actual de 300 millones de dosis al año podría vacunar apenas a un quinto de la población del gigante asiático. Por ello estudian o bien construir una nueva fábrica en China o transferir la fórmula y el conocimiento a otros países para que se pueda fabricar sobre el terreno.
Pruebas en niños
Sinovac comenzará el próximo lunes a ensayar en China su vacuna en niños y jóvenes de 3 a 18 años, la franja de edad que falta para comprobar la efectividad del medicamento. El pasado 9 de septiembre anunció que los resultados de los ensayos clínicos en las fases 1 y 2 habían mostrado «buena seguridad e inmunogenicidad» en adultos sanos mayores de 60 años, al igual que lo hicieron entre las personas de entre 18 y 59 años.
Cuatro vacunas chinas se encuentran actualmente en la fase 3 de ensayos clínicos -entre un total de nueve en el mundo-, aunque una de las cinco restantes forma parte de un consorcio formado por la china Fosun Pharma, la alemana Biontech y la estadounidense Pfizer. Las cuatro totalmente chinas son las de Sinovac, Sinopharm, el Instituto de Productos Biológicos de Wuhan y la de Cansino Biologics, que comenzó a usarse a finales de junio en el Ejército chino.