Un fuerte terremoto de magnitud 7,5 sacudió la mañana del miércoles cerca de Taiwán, generando alertas de tsunami en la región y en las islas del sur de Japón, según informaron las autoridades pertinentes.
La magnitud del sismo fue calculada en 7,5 por la Agencia Meteorológica Japonesa, aunque el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) lo registró como 7,4.
Autoridades de Taiwán, Japón y Filipinas emitieron alertas de tsunami para las zonas costeras, anticipando posibles olas de hasta tres metros.
El alcalde de Taipei, Chiang Wanan, declaró un nivel de emergencia dos para la ciudad, desplegando personal y equipos de respuesta ante posibles desastres.
El epicentro del terremoto se ubicó en el mar, a 25 kilómetros al sureste de la costa del condado Hualien de Taiwán, con una profundidad de 15,5 kilómetros.
El sistema de metro en ciudades como Taipei, Taichung y Kaohsiung suspendió sus operaciones temporalmente debido al sismo.
En Japón, la alerta de tsunami se extendió a las islas remotas cercanas a Taiwán, incluida la isla Miyakojima, según la agencia meteorológica.
Japón y Taiwán, dos áreas con alta actividad sísmica, han implementado tecnologías y protocolos avanzados para alertar y evacuar a la población en caso de emergencia.
Aunque se producen con frecuencia terremotos en estas regiones, las estrictas normas de construcción y los procedimientos de seguridad suelen limitar los daños causados por estos eventos naturales.
El terremoto más devastador registrado en Japón fue el de magnitud 9,0 en marzo de 2011, que desencadenó un tsunami y resultó en miles de muertes y desapariciones, así como en el desastre nuclear en Fukushima.
A pesar de las mejoras en las regulaciones de construcción, la vulnerabilidad de algunas estructuras, especialmente fuera de las áreas urbanas principales, sigue siendo un desafío en la región.