El fiscal especial estadounidense Jack Smith ha solicitado desestimar todos los cargos federales contra el presidente electo de EE.UU., Donald Trump. La moción hace referencia al caso por interferencia electoral federal contra el político, así como al de su mal manejo de documentos clasificados.
En una presentación judicial realizada este lunes, Smith señaló que una ley del Departamento de Justicia prohíbe procesar a un mandatario en funciones, por lo que será imposible continuar los casos debido a la inminente toma de posesión de Trump.
«Como resultado de las elecciones celebradas el 5 de noviembre de 2024, el acusado, Donald J. Trump, será investido presidente el 20 de enero de 2025«, reza el documento. «Hace mucho tiempo que el Departamento de Justicia sostiene que la Constitución de Estados Unidos prohíbe la acusación federal y el posterior procesamiento penal de un presidente en funciones», se explica.
«Pero el Departamento y el país nunca se han enfrentado a una circunstancia como esta, en la que un gran jurado haya presentado una acusación federal contra un ciudadano privado y ya se esté llevando a cabo un proceso penal cuando el acusado sea elegido presidente», manifestó Smith.
El fiscal informó haber llevado a cabo consultas con funcionarios del Departamento de Justicia sobre la situación. Tras analizar todos los detalles, se llegó a la conclusión de que la prohibición de procesar a un presidente en funciones se aplicaría a los casos pendientes contra Trump. «Esa prohibición es categórica y no depende de la gravedad de los delitos imputados, de la solidez de las pruebas del Gobierno ni de los méritos de la acusación, que el Gobierno respalda plenamente», escribió Smith en la moción.
Sin embargo, el fiscal dejó abierta la posibilidad de que el Departamento de Justicia pueda restablecer los cargos una vez termine el mandato de Trump como presidente. En este contexto, Smith pidió a la jueza de distrito estadounidense Tanya Chutkan que desestime los casos «sin perjuicio», un término legal que hace referencia a que podrían ser reabiertos en el futuro.
«Es una gran victoria»
Por su parte, el portavoz del político, Steven Cheung, destacó en un comunicado que «la decisión de hoy del Departamento de Justicia pone fin a los casos federales inconstitucionales contra el presidente Trump y es una gran victoria para el estado de derecho«.
«El pueblo estadounidense y el presidente Trump quieren que se ponga fin de inmediato a la utilización política de nuestro sistema de justicia y esperamos unir a nuestro país», concluyó.
El presidente electo ha afirmado en repetidas ocasiones durante la campaña que todas las acusaciones en su contra son falsas, señalando que se trata de «caza de brujas» con motivos políticos y que buscará una «retribución».