- Durante una actividad en que los líderes de las potencias presenciaban el salto de un paracaidista, el presidente de Estados Unidos se mostró totalmente despistado.
El estado de salud del expresidente de Estados Unidos, Joe Biden (81 años) sigue causando preocupación entre sus eventuales votantes demócratas, de cara a las elecciones presidenciales de este año en su país, donde se medirá con el exmandatario Donald Trump, quien, pese a los procesos judiciales por los que atraviesa, se consolida como el favorito para llegar, nuevamente, a la Casa Blanca.
El último de los episodios que evidencian el deterioro físico y cognitivo de Biden fue registrado en la cumbre del G7, que se celebró en Italia.
Los mandatarios de los siete grandes países, acompañados por el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, y por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, se reunieron en Borgo Eganzia (Apulia), en un paraje de gran belleza natural, y, en uno de los momentos programados durante la jornada, en el que los líderes asistían al salto de un paracaidista, el presidente estadounidense se mostró visiblemente despistado, con dificultades para mirar hacia el cielo, y alejándose del grupo.
Es en ese instante en que la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, tuvo que intervenir para tomarle el brazo con delicadeza el líder demócrata y reconducirle al grupo.
