James Earl Jones, quien rompió barreras raciales y superó una severa tartamudez para convertirse en un ícono del teatro y el cine, falleció a los 93 años. Su poderosa voz se hizo célebre en CNN, «El Rey León» y como Darth Vader en «Star Wars». Su agente, Barry McPherson, confirmó que Jones murió el lunes en su casa en el valle del Hudson, Nueva York, aunque no se aclaró la causa de su muerte.
Jones fue un pionero en la televisión, siendo uno de los primeros actores afroamericanos en un papel regular en el drama diurno «As the World Turns» en 1965. A lo largo de su carrera, que se extendió hasta sus 80 años, ganó numerosos premios, incluidos dos Emmys, un Globo de Oro, dos Tonys, un Grammy, la Medalla Nacional de las Artes, y los Kennedy Center Honors. En 2022, Broadway le rindió homenaje renombrando un teatro en su honor.
Incluso en sus últimos años, Jones mantuvo su elegancia, un agudo sentido del humor y una intensa ética de trabajo. En 2015, para los ensayos de «The Gin Game» en Broadway, llegó completamente preparado, con la obra memorizada y lleno de notas del equipo creativo. En sus propias palabras a Associated Press, dijo: «La necesidad de contar historias siempre ha estado con nosotros», reflejando su profunda comprensión del arte de la actuación.
Jones dejó una huella imborrable con papeles memorables como el escritor recluso en «El campo de los sueños», el boxeador Jack Johnson en «La gran esperanza blanca», el escritor Alex Haley en «Raíces: la nueva generación» y un ministro sudafricano en «Llora, el país amado». También prestó su voz a personajes emblemáticos como Darth Vader y Mufasa, y ganó un Grammy en 1977 por «Great American Documents».
Su influencia en la actuación fue tan profunda que Samuel L. Jackson una vez declaró: «Si eras actor o aspirabas a serlo… uno de los estándares que siempre tuvimos fue ser un James Earl Jones». Jones también participó en películas como «Dr. Strangelove», «Conan el Bárbaro», «Three Fugitives» y en adaptaciones de novelas de Tom Clancy, como «The Hunt for Red October».
En Broadway, debutó en 1958 con «Sunrise at Campobello» y ganó dos premios Tony por «The Great White Hope» (1969) y «Fences» (1987). Fue celebrado por su interpretación en obras de Shakespeare y Athol Fugard, y sus últimas apariciones en Broadway incluyeron «Cat on a Hot Tin Roof» y «Driving Miss Daisy».
James Earl Jones nació en una humilde choza en Arkabutla, Mississippi, en 1931. A los seis años, fue criado por sus abuelos en Michigan después de que su madre lo llevara allí. Debido a su tartamudez, permaneció prácticamente mudo durante años, pero un maestro inspirador lo ayudó a superar esa barrera, iniciando su camino hacia la actuación.
Su verdadero estrellato llegó en 1970 con «La gran esperanza blanca», una obra que exploraba el racismo en los Estados Unidos de principios del siglo XX. Su actuación le valió una nominación al Oscar en la versión cinematográfica de 1972.
Jones estuvo casado dos veces, primero con Julienne Marie Hendricks y luego con Cecilia Hart, con quien tuvo un hijo. En 2022, el Teatro Cort de Broadway fue renombrado en su honor, un gesto que, según el director Kenny Leon, celebró a «un artista que ha servido más a Estados Unidos».
Aunque no fue un activista político declarado, Jones creía en el poder del arte para influir en los sentimientos de las personas, si no en sus opiniones, señalando: «Puedes cambiar su forma de sentir».
