El más reciente sondeo de expectativas macroeconómicas realizado por el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) revela una disminución en el optimismo empresarial respecto a la economía peruana en el corto plazo.
En comparación con la ligera mejoría registrada en marzo, la confianza de los empresarios experimentó un retroceso en abril en 9 de los 12 indicadores evaluados.
El repunte observado el mes pasado, donde todas las expectativas se situaban en un terreno positivo, ahora ha dado paso a un ambiente de cautela. Notablemente, tres áreas han regresado a la zona de pesimismo: las expectativas sobre el sector en general, la situación esperada de las empresas a tres meses y la proyección de contratación de personal a corto plazo.
Según el último sondeo del BCR, la expectativa de crecimiento económico para el corto plazo (próximos 3 meses) ha descendido y ahora se sitúa en 50 puntos (nivel neutral). Un puntaje por debajo de los 50 puntos indica un panorama pesimista, según el Banco Central de Reserva.
Los empresarios muestran creencias de que la situación de sus compañías en los próximos tres meses empeorará. Este indicador ha disminuido de 53 a 49.6 entre marzo y abril, indicando un retorno al pesimismo. Lo mismo sucede con la percepción sobre la situación del sector económico en el que operan las empresas, disminuyendo de 51.2 a 49.8 puntos.
Por otro lado, las expectativas de contratación de personal para los próximos tres meses también han ingresado en terreno pesimista, cayendo de 51.2 a 49.3 puntos durante el período de análisis.
En cuanto a las expectativas a largo plazo (12 meses), si bien muestran una mejora, esta es menos optimista que en marzo y febrero. El ánimo futuro ha crecido 1 punto (hasta 60), sin embargo, no alcanza los niveles registrados a principios de año cuando hubo un aumento considerable de 54 a 62 puntos.
En términos de la percepción sobre la situación de las empresas a 12 meses, las expectativas de los empresarios se han desacelerado de 61.7 a 60.5 puntos.
Este panorama se presenta en un contexto donde la economía peruana ha mostrado un crecimiento impulsado por el llamado efecto «rebote». En febrero, la producción nacional creció un 2.85% en comparación con el mismo mes del año anterior. Sin embargo, algunos sectores aún muestran disminuciones, como la manufactura, los servicios financieros y de seguros, la pesca y el sector agropecuario.