- Fossati quiso hacer de intermediario entre su pupilo y Agustín Lozano, pero el volante habría dicho lisuras y que lo «estaban meciendo».
El diario Trome evidenció lo que ocurrió la noche anterior al comunicado donde el volante nacional Renato Tapia anunció que no estaría con la selección peruana para el amistoso contra El Salvador y tampoco para la Copa América, en Estados Unidos, debido a que, según su versión, la Federación Peruana de Fútbol no quería darle un seguro ante una grave lesión.
Según una fuente interna, los hechos ocurrieron en uno de los lobbies del hotel ‘Hyatt Centric’, de San Isidro. Es ahí donde apareció el «capitán del futuro» y se dirigió a Fossati y le dijo: «‘Profe’, lo siento mucho, pero no voy a viajar con ustedes, porque (Agustín) Lozano no quiere pagarme mi seguro ni mis 100 mil dólares mensuales (lo que gana en el Celta)«.
El técnico uruguayo lo miró asombrado y le pidió calma para buscar una solución. En ese momento, pasó el presidente de la FPF, Agustín Lozano, y todo se prendió. Lozano preguntó qué estaba ocurriendo y le pidió al mediocampista confianza para resolver el asunto.
Sin embargo, el testigo contó que Renato adoptó una posición malcriada, levantó la voz y le recordó al directivo su trayectoria como jugador y que, como ocurrió antes con Paolo Guerrero, tenían que pagarle su seguro.
Fossati quiso hacer de intermediario y pidió serenidad a su pupilo, pero el volante habría dicho lisuras y que lo «estaban meciendo».
Frente a ello, el DT de la ‘Bicolor’ le manifestó al futbolista que tenía que respetar a la autoridad y a él. No obstante, Tapia continuó reclamando hasta que el veterano estrategia se hartó de su actitud.
«Me trastocas todos los planes al venir a decirme que no viajas. Bueno, lo que soluciones lo solucionas con el presidente Lozano. Pero conmigo no viajas más, conmigo a la Copa no vas», aseveró Jorge Fossati, para luego darse media vuelta e irse.