Reserva Federal de Estados Unidos tiene espacio para bajar tasas e impulsar su economía
La reciente caída en los principales índices de la Bolsa de Nueva York, como el S&P 500, el Nasdaq y el Dow Jones, ha tenido un impacto significativo en los mercados bursátiles de América Latina. Estos índices experimentaron pérdidas notables, con el S&P 500 cayendo un 3%, el Nasdaq un 3.4%, y el Dow Jones descendiendo en 1033 puntos. Este descenso ha llevado a que las bolsas latinoamericanas también cierren en negativo, siguiendo la misma tendencia que Wall Street.
El economista Jimmy Astocóndor, docente en Pacífico Business School, señala que estos resultados deben tomarse con precaución. Según Astocóndor, las caídas en los índices de Nueva York son una reacción coyuntural más que una señal definitiva de recesión. Explica que el mercado tiende a reaccionar exageradamente ante noticias o expectativas negativas, y que, una vez que se ajusta la perspectiva, el mercado suele estabilizarse, a menos que las expectativas pesimistas se confirmen.
Por otro lado, Alberto Arispe, CEO de Kallpa SAB, ofrece una perspectiva diferente. En un evento organizado por El Dorado Investments, Arispe explicó que el mercado estadounidense había alcanzado picos históricos en julio, impulsado por expectativas optimistas de crecimiento. Sin embargo, las últimas semanas han mostrado que algunas grandes empresas, especialmente las megacaps, han reportado resultados inferiores a los esperados. Además, datos recientes sobre el empleo en EE.UU. sugieren un enfriamiento de la economía, lo que ha llevado a ventas masivas en el mercado.
Arispe considera que la reciente caída en los mercados puede ser vista como una oportunidad para tomar ganancias, dado el fuerte crecimiento observado en los últimos 18 meses. A pesar de la mayor probabilidad de una recesión según Goldman & Sachs, Arispe cree que estamos lejos de una recesión inminente. Además, anticipa que la Reserva Federal de EE.UU. podría reducir las tasas de interés en septiembre, ya que la inflación está bajo control. Esto proporcionaría un impulso a la economía estadounidense, favoreciendo una política monetaria más expansiva.
En cuanto a la Bolsa de Valores de Lima (BVL), ha registrado un desempeño negativo debido a la influencia de los mercados internacionales. El índice general S&P/BVL y el índice selectivo S&P/BVL retrocedieron un 1.86% y un 1.47%, respectivamente. Sin embargo, Arispe subraya que la BVL está fuertemente influenciada por los precios internacionales del cobre. Los buenos precios de este metal han tenido un efecto positivo en el mercado bursátil local, proporcionando cierta estabilidad a pesar de la volatilidad.
Aunque unque la caída en los índices bursátiles de Nueva York y su impacto en los mercados latinoamericanos puede ser preocupante, es crucial considerar el contexto más amplio. Las expectativas económicas y las políticas monetarias futuras, como una posible reducción de tasas por parte de la Reserva Federal, podrían ayudar a estabilizar los mercados y ofrecer oportunidades a largo plazo. Mientras tanto, los inversores deben mantenerse informados y considerar tanto los riesgos como las oportunidades que presentan las condiciones actuales del mercado.