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César Candela: “La inversión en infraestructura es fundamental para la recuperación económica y el crecimiento sostenible del Perú”

El director ejecutivo de la Sociedad Nacional de Construcción e Infraestructura (SNCI), consideró acertada la propuesta del Ejecutivo de crear un nuevo ministerio, el de la Infraestructura, que amalgame el desarrollo de la obra pública, en mejores condiciones para el país.

El Ejecutivo ya presentó al Congreso el proyecto de ley para la creación del anunciado Ministerio de Infraestructura. ¿Qué opinión tiene?

—La creación de un Ministerio de Infraestructura es una iniciativa que fue demandada por el sector durante mucho tiempo. Es un paso necesario para darle la atención, la coordinación y la importancia que merece.

—Se concentrará toda la obra pública en una sola entidad…

—Así, es. Y la concentración de la mayoría de ejecución de obra pública en un solo Ministerio permitirá un enfoque estratégico, una mejor gestión y un impulso efectivo a la planificación, ejecución y mantenimiento de los proyectos de infraestructura en el Perú.

—¿Algunas entidades deberían quedar fuera del ámbito del nuevo portafolio?

—Es importante precisar que el Proyecto Especial Legado no debe estar dentro de este sector por la naturaleza de su infraestructura. Además, en el debate del Congreso deberá explicarse por qué no hay entidades incluidas como Sedapal, Copesco o las Direcciones de Proyectos de otros portafolios dentro del Ministerio.

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¿Un nuevo Ministerio de Infraestructura es lo que realmente necesita el país?

—Absolutamente. Esto es fundamental para el crecimiento económico, la generación de empleo, la mejora de la calidad de vida, la integración del país y sobre todo para contar con una sola política nacional en infraestructura.

—Suena bien. Pero ¿qué más?

—Un Ministerio dedicado a este sector permitirá consolidar la visión de largo plazo, optimizar la gestión de recursos, y asegurar la articulación eficiente de los diversos actores involucrados en el desarrollo de la infraestructura, desde la planificación hasta la ejecución y el mantenimiento. Por otro lado, permitirá monitorear el Plan Nacional de Infraestructura y el avance en el cierre de brechas.

¿Qué otros aportes se esperan?

—El principal beneficio es la creación de un marco institucional sólido y especializado para el desarrollo de la infraestructura, lo que permitirá generar un clima de confianza para las inversiones, tanto nacional como internacional. Además, se espera mayor eficiencia en la gestión de los proyectos, mejor coordinación intersectorial, y la implementación de políticas públicas que fomenten la innovación y la sostenibilidad en el sector.  Es vital que, así como se espera contar con un Ministerio de esta magnitud sin una debida y permanente capacitación de todos los actores, los esfuerzos serán inútiles. Ambas deben ir de la mano.

En el contexto de la reactivación económica, ¿qué papel jugaría la infraestructura en la recuperación del país?

—Es un motor de desarrollo, un catalizador de la reactivación económica. Proyectos estratégicos como carreteras, puertos, aeropuertos, y sistemas de riego, no solo generan empleo en la etapa de construcción, sino también impulsan el desarrollo de otras industrias, dinamizan el comercio, facilitan la conectividad y mejoran la competitividad del país. La inversión en infraestructura es fundamental para la recuperación económica y el crecimiento sostenible del Perú.

¿Cómo incidirá la modificación a la Ley de Asociaciones Público Privadas (APP) a los proyectos de infraestructura en curso y futuros?

—Las modificaciones a la Ley de APP deben ser cuidadosamente analizadas. Se debe escuchar a los gremios que llevan el pedido y posición del sector privado. Hay que reducir aún más, y en lo posible, el número de pasos a seguir en cada uno de los modelos de APPs ya sean financiadas o autofinanciadas. Por ningún motivo debe dejarse que ProInversión se encuentre dentro del Ministerio de Infraestructura, mas aún si a la fecha viene desarrollando un buen trabajo. 

¿Qué expectativa tiene sobre los Proyectos en Activos y cómo cree que contribuirán a la mejora de la infraestructura nacional?

—Los Proyectos en Activos representan una oportunidad para mejorar la infraestructura existente y optimizar su gestión. Es crucial que se diseñen mecanismos eficientes para que se ejecuten con transparencia, responsabilidad y eficiencia, asegurando la participación del sector privado y la sostenibilidad de las operaciones. Estos proyectos pueden contribuir significativamente a la mejora de la calidad de los servicios, la reducción de costos de mantenimiento y la extensión de la vida útil de las infraestructuras existentes. Hay que difundir más el uso de esta figura que no se utiliza como debería.

El megapuerto de Chancay es un proyecto ambicioso. ¿Qué desafíos regulatorios y logísticos anticipa para ordenar las zonas aledañas y asegurar su éxito?

—El megapuerto de Chancay tiene un potencial enorme para el desarrollo económico del Perú. Es fundamental que se implemente un plan integral de desarrollo territorial que articule el proyecto portuario con las zonas aledañas.

—¿Qué debe contener ese plan?

—Esto implica la planificación de la infraestructura de transporte, la gestión de los recursos hídricos, la protección del medio ambiente y la integración social. Además, se necesita un marco regulatorio claro y transparente para atraer inversiones, promover la competitividad y asegurar la sostenibilidad del proyecto. Estamos atentos a los Decretos Legislativos que el Poder Ejecutivo debe aprobar y publicar de acuerdo a las facultades aprobadas por el Congreso recientemente.

¿Qué medidas específicas propone la Sociedad Nacional de Construcción e Infraestructura,  para asegurar que los proyectos en este ámbito se ejecuten de manera ética; es decir, sin corrupción, de manera eficiente, eficaz y con calidad?

—La SNCI promueve la implementación de un sistema que incorpore estándares internacionales de calidad, transparencia, ética y seguridad. Este sistema debe abarcar todo el ciclo de vida de la infraestructura, desde la planificación hasta el mantenimiento. Debemos fortalecer la capacidad institucional, promover la formación de profesionales especializados, e impulsar la innovación tecnológica. Además, es fundamental promover la participación ciudadana en el proceso de decisión y la fiscalización de los proyectos de infraestructura. La SNCI cree que los gremios no sólo deben señalar o cuestionar también deben proponer y es lo que venimos haciendo a la fecha desde nuestra creación.

¿Cómo evalúa el marco regulatorio actual para la infraestructura en el Perú y qué cambios considera necesarios para fomentar una mayor inversión?

—El marco regulatorio necesita ser revisado constantemente para facilitar la inversión y agilizar los procesos. Se debe mejorar la coordinación interinstitucional, reducir la burocracia y eliminar la duplicidad de trámites. Es fundamental que las normas sean claras, estables y predecibles para generar confianza en los inversionistas y promover la competencia en el sector. Además, se debe reforzar la seguridad jurídica y asegurar la aplicación efectiva de las leyes para garantizar que las inversiones se realicen bajo un marco de transparencia y responsabilidad. Insistimos que la capacitación debe ser permanente porque sin ésta nada servirá por más innovador que sea.

¿Qué impacto espera que tenga la delegación de facultades en la aceleración de proyectos de infraestructura claves?

—La delegación de facultades debe ser utilizada con responsabilidad y transparencia para facilitar la ejecución de proyectos estratégicos.

—Pero ¿qué se requerirá para ello?

—Es importante que se establezcan mecanismos de control y rendición de cuentas para asegurar la correcta utilización de estas facultades y evitar la discrecionalidad en la toma de decisiones. La aceleración de proyectos debe ir acompañada de un marco legal sólido, la participación ciudadana y la fiscalización de los recursos públicos. Esperamos que las normas que serán publicadas en estos 90 días sean realmente la base de la mejora que el país necesita para una reactivación económica más agresiva, reducción de la pobreza, generación de más puestos de trabajo y el cierre de brechas de infraestructura.

¿Cómo está trabajando la SNCI para asegurar que las nuevas políticas y regulaciones beneficien tanto a las empresas como a la población en general?

—La SNCI trabaja en estrecha colaboración con el gobierno y el sector privado para asegurar que las nuevas políticas y regulaciones promuevan el desarrollo sostenible del sector de la infraestructura. Es crucial que las políticas se orienten a generar un impacto positivo en la economía, la sociedad y el medio ambiente. Para ello, se busca promover la participación ciudadana, el diálogo abierto y la cooperación entre los distintos actores involucrados. Además, trabajamos en la difusión de las mejores prácticas internacionales y el desarrollo de capacidades para la implementación efectiva de las políticas públicas en el sector. A la fecha hemos participado en reuniones en diversas Comisiones y debates del Congreso, mesas de trabajo con Proinversión, ANIN, reuniones con el premier y ministros de Estado, entrevistas en medios, difusión y publicación de comunicados y todo aquello que brinde la posibilidad de viabilizar los pedidos o sugerencias de las empresas.

¿Qué rol cree que deben jugar las empresas privadas en la implementación de estos proyectos de infraestructura y cómo pueden colaborar más efectivamente con el sector público?

—El sector privado tiene un rol fundamental en la implementación de los proyectos de infraestructura. Las empresas privadas aportan experiencia, tecnología, innovación y eficiencia. Para una colaboración más efectiva, es necesario fortalecer la coordinación entre el sector público y privado, promover la transparencia en los procesos de licitación y contratación, y facilitar la participación de las pequeñas y medianas empresas en los proyectos. Además, es fundamental establecer un diálogo constante para identificar las necesidades del país, definir las prioridades de inversión, y construir un modelo de colaboración más eficiente y beneficioso para todos.