El primer ministro reiteró su rechazo al requerimiento de la entidad supranacional al Estado peruano para que no se apruebe la ley que especifica la aplicación de los delitos de lesa humanidad.
El premier Gustavo Adrianzén no descartó que el Perú renuncie a las competencias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte-IDH).
«En un escenario como este, no estamos en condiciones de descartar ninguna acción de Gobierno, pero aquella que se vaya a tomar, pueden estar seguros de que va a ser resultado de un profundo análisis y de una reflexión», expresó el jefe de la PCM en conversación con Canal N.
En concordancia con ello, el primer ministro reiteró su rechazo al requerimiento de la Corte-IDH al Estado peruano para que no se apruebe la ley que especifica la aplicación de los delitos de lesa humanidad y crímenes de guerra, cometidos antes del 2002.
Recordemos que, en la víspera, la Comisión Permanente del Parlamento aprobó, en segunda votación, dicha norma, la cual deberá ser promulgada u observada por el Ejecutivo.
«Sentimos que hay una corte de justicia supranacional que está excediendo de una manera ya insólita sus facultades y llegando al extremo de querer prácticamente maniatar a los poderes del Estado, diciéndoles que no pueden hacer tal o cual cosa y este que es un Estado soberano que se rige por el principio de separación de poderes, no lo puede admitir», manifestó Adrianzén.
Según el titular del Consejo de Ministros, desde el Gobierno pueden estar a favor o en contra de propuestas del Congreso, pero, “de ninguna manera”, podrían pedirles que dejen de cumplir con su labor de legislar.