Miguel Nina Merma, presidente de las Rondas Campesinas del distrito de Corani, en la provincia de Macusani, Puno, habló con Altavoz, y ratifica que el pueblo está de acuerdo con el proyecto minero de litio que desarrolla la empresa Macusani Yellowcake. Anotó que el 14 de julio es la fecha fijada para el último taller de consulta previa que debe ratificar la aprobación de la comunidad. Demandó celeridad a las autoridades para que den el visto bueno final para el inicio de las obras.
—¿Qué pasó el 21 de junio en el proceso de consulta previa en Quelcaya?
—Se desarrolló el taller de la consulta previa con normalidad, que dio como resultado nuevamente que toda la población está de acuerdo con la ejecución del proyecto de litio.
—¿Habrá una próxima reunión en este proceso?
—El 14 de julio es la próxima fecha del taller de consulta previa en Quelcaya, para ratificar la aprobación del pueblo, su aceptación a la ejecución del proyecto minero de litio que desarrolla la empresa Macusani Yellowcake. Es lo último, ese día se tiene que firmar un acta.
—¿Qué cree que pase ese 14 de julio?
—En esa fecha se a firmar el acta entre las autoridades y los comuneros en general. Es la autorización, el acuerdo del pueblo, de que sí efectivamente está de acuerdo con la inversión privada.
—¿Están convencidos en la ratificación de ese acuerdo?
—Por supuesto que sí. Eso siempre ha sido el pedido, porque los emprendedores, los comuneros, esperan la oportunidad de la inversión privada, porque el Estado acá no llega.
—¿Cuántas personas participaron en la reunión del pasado 21 de junio?
—Aproximadamente 300 comuneros o algo más.
—¿Quiénes estaban exactamente?
—Los comuneros de la Comunidad de Quelcaya, con todas sus autoridades, los representantes de las organizaciones que hay dentro de la comunidad.
—¿Y por parte del Estado quiénes estuvieron?
—Las personas que participaron en el taller de consulta previa pasado (21 de junio) y otras también.
—¿Y cuál es el papel de las rondas campesinas en todo este proceso?
—Las rondas campesinas de las cinco comunidades del distrito de Corani son nativas. Tienen sus representantes y administran todo el territorio de la comunidad.
—¿De qué se encargan las rondas campesinas?
—Nosotros en las rondas campesinas nos encargamos de administrar la justicia comunitaria, resolviendo conflictos, participamos en la seguridad ciudadana y en muchas cosas. En el tema de fiscalización no solamente es a las entidades públicas, también a las privadas. En el caso de los privados también estamos facultados para la fiscalización.
—¿Y cómo fue su actuación en la consulta previa del pasado 21 de junio?
—La semana del taller de consulta previa estábamos atentos a lo que ocurriese con el ministerio (de Energía y Minas), con los ministerios que ven estos temas de consulta previa y con otros que fuese de interés del pueblo. Es eso, nuestra función es netamente la de administrar la justicia comunitaria, resolver conflictos, también la fiscalización, en ese sentido siempre podemos intervenir.
—¿A qué hora se realizará la nueva reunión el próximo 14 de julio?
—A las nueve de la mañana.
—En la ronda se determinará que le den la autorización a la empresa minera…
—Efectivamente. Con eso termina la consulta previa. Ya después de eso vienen los siguientes pasos propios del proceso, los trámites del Estado que tienen que ser rápidos porque el pueblo está a la expectativa del inicio de las obras.
—¿Y por qué están de acuerdo con la ejecución del proyecto minero de litio en Corani?
—Nosotros queremos que de una vez se dé el permiso para que se ejecute el proyecto, por las oportunidades que los comuneros, la población espera, ya sea en puestos de trabajo y en las oportunidades de emprendimientos. Eso solo lo conseguimos por la inversión privada porque, como dije, la presencia del Estado es ausente por esta zona. Además, con la crisis económica que estamos pasando en el país, estamos obviamente muy preocupados y por ello interesados en esa oportunidad de inversión.
—¿Que demanda a las autoridades del Ministerio de Energía y Minas?
—Yo invoco a todas las autoridades y funcionarios que trabajan en el Ministerio y también al Ejecutivo que de una vez por todas actúen con la celeridad que el caso amerita porque acá la inversión privada es vista con otros ojos.
—Explíquese…
—Nosotros en particular nos hemos alejado de los anti mineros que seguramente tienen intereses particulares; pero nosotros, más que todo las rondas campesinas, nunca les hemos permitido nada a esos grupos. Por eso, dentro del distrito la población expresa su verdadero sentir sobre la necesidad de que haya inversión, la necesidad de que haya oportunidades de trabajo y de desarrollo.
—Qué tal convencimiento…
—Si la inversión privada trae oportunidades para la población que hagan saber también cuál es el plan a futuro para un desarrollo sostenible. Eso la población lo ha entendido bien y también está en las demandas de las comunidades que las entidades privadas también lo han aceptado. Por eso es que la población está conforme con este proyecto.
