Jaime Villanueva declaró a la Fiscalía que Graciela Villasís recibía información privilegiada a cambio de respaldo del diario El Comercio a los fiscales del Equipo Especial Lava Jato.
El colaborador Jaime Villanueva, exasesor de la suspendida fiscal de la Nación, Patricia Benavides, aseguró, ante el Ministerio Público, que la periodista Graciela Villasís recibía información reservada de los fiscales del caso Lava Jato a cambio de apoyo del diario El Comercio.
A propósito, Hugo Guerra, periodista y abogado, alertó, en entrevista con Altavoz.pe, que estaríamos frente a una gravísima situación de tráfico de información.
- Jaime Villanueva reveló que Graciela Villasís recibía información del caso Lava Jato a cambio de que El Comercio, donde has trabajado, brindara su apoyo a los fiscales Rafael Vela y Domingo Pérez. ¿Consideras que esta revelación como algo periodístico que debe ser de conocimiento público?
Jaime Villanueva es un colaborador eficaz y sus dichos tienen que ser probados, pero una denuncia de esta naturaleza amerita no solamente que sea conocida, sino también investigada, porque revela una situación muy grave, que es que un medio muy prestigioso, como lo es el diario El Comercio, estaría vinculado al tráfico de documentos y al acceso de información privilegiada de forma absolutamente irregular.
- En su momento, hubo una defensa prácticamente colegiada de los medios, salvo excepciones, como Expreso o Willax, a los fiscales del Equipo Especial Lava Jato. Eso fue evidente.
En líneas generales, son muchos los medios de comunicación que, efectivamente, han venido haciendo una defensa cerrada de las acciones de la Fiscalía en los casos Lava Jato y otros casos políticos. Han estado recibiendo material clasificado y de manera privilegiada, lo cual significa que no se ha estado haciendo un periodismo competitivo y abierto, sino con accesos indebidos a expedientes reservados.
- Yo recuerdo, en el caso específico de Villasís, que, en tanto los funcionarios de Odebrecht declaraban en Brasil, ella iba tuiteando, en vivo, lo que ellos decían. Eso, según Villanueva, era porque Vela le pasaba la información.
No sé quién le entregó la información, pero es evidente que tenía información privilegiada.
- Pero los periodistas no pueden ser meras mesas de partes de los fiscales del Equipo Especial Lava Jato ni de ningún fiscal.
Los periodistas no pueden ser mesas de partes de nadie, porque, entonces, pasan a ser activistas políticos.
- Y, dado que los fiscales Lava Jato filtran información a sus periodistas preferidos, no se les cuestiona por, por ejemplo, ese nefasto acuerdo de colaboración eficaz que se firmó con Odebrecht, que solo nos pagará 610 millones de soles de reparación civil.
Esa es una posición editorial que no se entiende, pero, si está vinculada al tráfico de información, sería gravísimo. El país entero reclama que se haga público este acuerdo, que es una traición a la patria, con Odebrecht, ¿por qué un medio de comunicación no se sumaría a este clamor ciudadano? Es llamativo.
- Los fiscales del Equipo Especial Lava Jato tampoco han tenido ningún logro porque aún no existe ninguna condena definitiva.
No solamente no han tenido logros, sino que han permitido que la empresa corrupta Odebrecht siga contratando con el país.
- Es más, permitieron que Odebrecht se quede con la venta de la hidroeléctrica de Chaglla.
Es totalmente ridículo.
- Si bien lo que dice Jaime Villanueva sobre Villasís tiene que corroborarse, ¿cuál es la reflexión? ¿Acaso que un periodista no puede mimetizarse con su fuente?
Un periodista no puede ser vocero de su fuente, no puede recibir información privilegiada a cambio de un ofrecimiento de posición editorial, porque eso convierte al medio de comunicación en un operador político.