Con series accesibles para los favoritos, la Copa Libertadores 2024 tendrá una fase de grupos colmada de partidos atractivos y sin ningún cruce entre equipos de un mismo país, según el sorteo celebrado por la Conmebol este lunes en Asunción
La Confederación Sudamericana de Fútbol sorteó en su sede en Paraguay los grupos de las dos «joyas de la corona», la Libertadores, máximo torneo de clubes del continente y la Copa Sudamericana. En ambos torneos se vivirán duelos de alto vuelo como el que protagonizarán en Libertadores los campeones Palmeiras y San Lorenzo de Argentina, Peñarol-Atlético Mineiro y River Plate argentino ante Nacional de Uruguay.
El campeón reinante, el Fluminense de Brasil, que venció a Boca en la final de 2023 en el mítico Maracaná, abre la defensa de su corona en un Grupo A que completan Cerro Porteño de Paraguay, Alianza Lima de Perú y Colo Colo de Chile.
El tricampeón Sao Paulo se verá las caras en el B con Barcelona de Ecuador, Talleres de Argentina y Cobresal de Chile. También parejo, los multiplecampeones Gremio y Estudiantes de La Plata se medirán en el C junto a The Strongest y Huachipato, de Bolivia y Chile, respectivamente.
Liga de Quito, vigente campeón de la Copa Sudamericana, irá en D ante Junior (COL), Universitario (PER) y Botafogo (BRA).
El poderoso Flamengo en el Grupo E enfrentará a Bolívar, el colombiano Millonarios y Palestino de Chile.
Palmeiras, otro multiplercampeón, tendrá una llave de gran nivel junto a Independiente del Valle, San Lorenzo y el uruguayo Liverpool.
Peñarol, con cinco coronas que festejó por última vez un título en 1987, se verá las caras con Atlético Mineiro, Rosario Central y Caracas.
Mientras que River Plate argentino largará su búsqueda de la final que se disputará en su casa ante Libertad de Paraguay, Táchira de Venezuela y el Uruguayo Nacional.
Boca-Fortaleza, duelo de Sudamericana
Para la fase de grupos de la Sudamericana, la rueda de la suerte deparó a Boca, subcampeón de la Libertadores en 2023, un Grupo D en el que medirá fuerzas ante Fortaleza, Nacional Potosí de Bolivia y Sportivo Trinidense de Paraguay, debutante en el torneo.
Corinthians por su parte irá en el Grupo F ante Argentinos Juniors, Racing de Uruguay y Nacional de Paraguay.
Mientras que Racing argentino tendrá en el Grupo H a Coquimbo Unido de Chile, Sportivo Luqueño de Paraguay y Bragantino de Brasil.
Copas millonarias
El sorteo sirvió para que el presidente de la Conmebol Alejandro Domínguez hiciera un repaso por el crecimiento en audiencia y en premios que han tenidos los dos torneos estrella de la Conmebol.
Domínguez resaltó que el premio al campeón, independiente del ingreso que los clubes reciben por cada partido jugado, tendrá un aumento alcanzando los 23 millones de dólares.
«Será el torneo mejor pago, con el premio más alto a nivel mundial», para una final, dijo el mandamás de la Conmebol.
En fase de grupos cada club recibirá un millón de dólares por partido, más otros 330 mil para el vencedor por mérito deportivo.
El campeón de la Sudamericana recibirá 6 millones de dólares, un millón más que en 2023 y el vicecampeón 2 millones de la divisa estadounidense.
Francescoli, homenaje a un multiplecampeón
La noche tuvo la presencia de varias figuras del fútbol sudamericano, como el brasileño Cafú y el paraguayo Roque Santa Cruz, y sirvió para que un veterano campeón recibiera un sentido homenaje.
El uruguayo Enzo Francescoli recibió de manos de Domínguez, trofeos que representaron su tricampeonato en la Copa América junto a la selección charrúa ( 1983-1987 y 1995) y la conquista de la Copa Libertadores junto a River Plate argentino en 1996.
Francescoli soltó: «Es una emoción duplicada», al recibir los trofeos. «Gracias por este momento espectacular que me han hecho pasar».
A sus 62 años, Francescoli se emocionó ante sus pares, incluidos varios de sus compañeros de equipo a lo largo de su carrera, al recibir los elogios de Domínguez que recordó los años dorados de «El Principe», surgido en Montevideo Wanderers de su país.
Francescoli se consagró en los ochenta en River Plate, paseó su fútbol por las ligas de Francia e Italia antes de regresar al equipo «millonario» para ganar la ansiada Libertadores en 1996.
