El congresista de Renovación Popular, Jorge Montoya, persiste en sus esfuerzos por proponer un pleno extraordinario que permita avanzar con la moción N° 9525, la cual busca la remoción inmediata de los siete miembros de la Junta Nacional de Justicia (JNJ). Tanto Montoya como su colega de bancada, Alejandro Muñante, fueron impulsores clave de esta solicitud, la cual aún está pendiente de resolución debido a que el Congreso se encuentra fuera de legislatura.
Montoya expresó su descontento con la forma en que el presidente del Congreso, Alejandro Soto, decidió dar por concluida la legislatura sin atender la solicitud de ambos congresistas. Esto ocurrió después de que Soto solicitara a Montoya y Muñante, a petición de los miembros de la JNJ, que especificaran los motivos para intentar removerlos por «falta grave».
Tras detallar los motivos que califican las acciones de los consejeros de la JNJ como «falta grave», Montoya reiteró la posibilidad de realizar un «pleno extraordinario». Este se acerca cada vez más al mínimo de 78 firmas necesario para llevarlo a cabo fuera de la legislatura, mediante la convocatoria de la Comisión Permanente.
En declaraciones al diario Correo, Montoya afirmó que cuentan con las firmas necesarias y destacó el consenso para lograr el cambio en la JNJ. Se mostró seguro de obtener más firmas durante la próxima semana y anunció la intención de plantear el pleno parlamentario tan pronto como sea posible.
Montoya indicó que su solicitud ha ganado fuerza con el respaldo de diversas bancadas, incluyendo el ‘Bloque Democrático’, así como bancadas de centro y legisladores no agrupados. Aunque la solicitud espera ser incluida en la agenda, Montoya insiste en la posibilidad de convocar a un pleno extraordinario para atender la destitución inmediata de los miembros de la JNJ.
A pesar de que este no es el primer intento legislativo para destituir a los magistrados de la JNJ, la actual coyuntura es más desafiante debido a la ausencia de muchos legisladores en la capital, quienes han dejado el país durante las festividades y el receso legislativo. Sin embargo, se contempla la opción de un nuevo intento de forzar el pleno parlamentario extraordinario, aprovechando la posibilidad de realizarlo virtualmente si se logran las 78 firmas necesarias.