El Gobierno peruano había anunciado que la presidenta participaría en una «reunión bilateral» con el presidente Joe Biden durante la Cumbre de Líderes de la Alianza para la Prosperidad Económica en las Américas. Sin embargo, la reunión se limitó a un breve encuentro en un pasillo.
La presidenta de Perú, Dina Boluarte, anunció el 1 de noviembre que tendría una reunión bilateral con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en el contexto de la Cumbre de Líderes de la Alianza para la Prosperidad Económica en las Américas (APEP). Sin embargo, este encuentro se redujo a un breve paseo por un pasillo, y desde el principio, la agenda de Joe Biden no incluía una reunión con la presidenta peruana.
Boluarte había expresado su agradecimiento a los congresistas por autorizar su viaje a Estados Unidos con el propósito de atraer inversiones para atender las necesidades de la población peruana. Sin embargo, las expectativas de una reunión bilateral con Biden se desmoronaron, ya que su agenda detallada no mencionaba tal encuentro.
El gobierno peruano presentó un documento en el que aseguraba la confirmación de la reunión bilateral, pero la Casa Blanca desmintió esto. Además, la prensa y legisladores peruanos expresaron su descontento por lo que consideraron un engaño y un daño a la imagen internacional del país. Cancillería atribuyó la falta de la reunión a problemas de tiempo, y los congresistas exigieron explicaciones sobre lo sucedido.
En resumen, la anunciada reunión bilateral entre Dina Boluarte y Joe Biden en la cumbre APEP resultó ser un simple encuentro en un pasillo, generando críticas y demandas de esclarecimiento por parte de varios sectores en Perú.
