Patricia Correa informó que ha presentado su renuncia, con carácter de irrevocable, al cargo de ministra de Educación que asumió el pasado 10 de diciembre dentro del gabinete presidido por Pedro Angulo.
En una carta enviada a la presidenta de la República, Dina Boluarte Zegarra, Correa explicó las circunstancias que la llevaron a tomar esta decisión.
La misiva señala que aceptó ser ministra del sector motivada por la responsabilidad de garantizar el derecho a la educación de todos los estudiantes peruanos, lo que compromete el futuro de la República, dentro de los marcos democráticos e institucionales.
Añade que el Perú enfrenta una crisis política de grandes dimensiones que demandan convicciones democráticas, respeto al orden y a la vez a la integridad física y la vida de cada ciudadano peruano, que, añadió, «lamentablemente se han visto vulneradas en las últimas horas».
«Como país, tenemos la responsabilidad de encontrar el rumbo que nos conduzca a dar un futuro viable a todos los peruanos y peruanas», finaliza la carta en la que también agradece la confianza depositada en su persona.
En el mensaje en su cuenta de Twitter, Correa señala también que «la muerte de connacionales no tiene justificación alguna» y que «la violencia de Estado no puede ser desproporcionada y generadora de muerte», en referencia a los fallecidos por las protestas de los últimos días.