La Cancillería peruana reafirmó ante el Adrienne Arsht Latin American Center la necesidad de una salida pacífica a la crisis venezolana, generada desde el propio pueblo de ese país.
«Se requiere una solución política para un problema político, originado por la ruptura del estado de derecho y del orden constitucional», señaló vía Twitter.
Según remarcó, la protección de la dignidad humana y los derechos humanos de los hermanos venezolanos constituyen un asunto de hondo interés por atender.
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«En tal sentido, el Perú reiteró su plena disposición a apoyar los esfuerzos del pueblo venezolano para salir de la crisis», subrayó la Cancillería.
Recordó, además, la importancia del pedido a la Corte Penal Internacional (CPI) de Argentina, Canadá Chile, Colombia, Paraguay y Perú para investigar los crímenes de lesa humanidad que habrían tenido lugar en Venezuela, desde febrero de 2014.
«Al pedido a la CPI, se sumaría el Reporte de la Misión de determinación de los hechos en Venezuela, creada por el Consejo de Derechos Humanos, como información complementaria para la investigación», agregó.
