Dos ataques perpetrados por Israel, este lunes, en el extremo sur de la Franja de Gaza han dejado dos muertos y tres heridos.
De acuerdo con fuentes médicas gazatíes, dos misiles fueron lanzados desde helicópteros matando a dos palestinos en la ciudad de Rafah.
«Las tropas identificaron a dos sospechosos que se acercaban a ellos en el sur de Gaza y que representaban una amenaza directa. Las tropas abrieron fuego para eliminar la amenaza y se identificaron víctimas», ha confirmado el Ejército.
El ejército también informó de otro ataque que dejó tres palestino heridos en la costa de Jan Yunis, también en el sur, donde un barco motorizado «sospechoso y que violaba las restricciones de seguridad» fue atacado porque «representaba una amenaza» después de que llevaran a cabo disparos de advertencia para dispersarlos. También se han registrado ataques de artillería en Yabalia, en el norte de la Franja de Gaza.
Estos ataques ocurren después de que el viernes pasado terminara la primera fase del alto al fuego en el enclave sin acuerdo entre las partes para dar inicio a la segunda fase en las negociaciones, que contempla la liberación del resto de rehenes todavía retenidos en Gaza y la retirada total de las tropas israelíes.
Israel ha propuesto extender otros 42 días la primera fase, mientras que Hamás califica esto como una violación al acuerdo inicial e insiste en comenzar a negociar la segunda fase.
Como represalia a la negativa de Hamas de no aceptar la extensión, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, anunció este domingo la suspensión de la entrada de ayuda humanitaria al enclave, acusando a Hamás de «no aceptar el borrador» planteado por el enviado especial estadounidense a Oriente Próximo, Steve Witkoff, para continuar las conversaciones, que proponía una extensión de la primera fase de la tregua, publicó el portal web de Rtve.
La decisión fue rechazada por Catar, uno de los mediadores del conflicto, y acusa a Israel de «el uso de la comida como arma de guerra».
El Ministerio de Exteriores catarí ha manifestado en un comunicado el «firme rechazo» del país «al uso de la comida como arma de guerra y la inanición deliberada de civiles», por lo que ha llamado a la comunidad internacional a «responsabilizar a Israel y garantizar la entrada de ayuda humanitaria de forma segura, continua y sin obstáculos». Catar, mediador junto a Egipto y Estados Unidos de la tregua en Gaza, se une así a la oleada de condenas a esta medida, rechazada también por otros países como Arabia Saudí, Jordania o la Liga Árabe.
La Oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, anunció este domingo la suspensión de la entrada de ayuda humanitaria al enclave, acusando a Hamás de «no aceptar el borrador» planteado por el enviado especial estadounidense a Oriente Próximo, Steve Witkoff, para continuar las conversaciones, que proponía una extensión de la primera fase de la tregua.
Con el final de la fase 1 (…), el primer ministro Netanyahu ha decidido que, a partir de esta mañana, toda entrada de bienes y suministros a la Franja de Gaza cesará», detalló el comunicado. «Israel no aceptará un alto el fuego sin la liberación de nuestros rehenes. Si Hamás mantiene su negativa, habrá más consecuencias», advirtió la oficina de Netanyahu.
La segunda fase debió haber comenzado a principios de febrero pero las partes no han logrado acordar la retirada de las tropas israelíes o la gobernanza de Gaza.
Ataque en Haifa dejó un muerto y cuatro heridos
Mientras se eleva la tensión en Cisjordania y el riesgo de que vuelvan los combates a la Franja de Gaza, también han aumentado los ataques de palestinos en suelo israelí. Un anciano de 70 años ha muerto y otras cuatro personas resultaron heridas en un ataque por apuñalamiento dentro de un autobús en la estación central de Haifa, principal ciudad del norte de Israel, confirmaron la Policía israelí y los servicios de emergencia,
«Nuestros paramédicos han declarado muerto en el lugar a un hombre de unos 70 años y atienden a cuatro pacientes, tres en estado grave (un hombre y una mujer de unos 30 años y un menor de 15), así como una mujer septuagenaria en estado moderado», ha informado el servicio de ambulancias Magen David Adom (MDA). Han sido todos trasladados al hospital Rambam de Haifa.
La Policía ha indicado que un guardia de seguridad y un civil han «neutralizado y eliminado» al atacante que han calificado de «terrorista». Este ha sido identificado como un ciudadano druso israelí, que había pasado los últimos meses en el extranjero y regresado a Israel la semana pasada. «Estamos rastreando la zona para descartar la presencia de más agresores», ha afirmado en un comunicado el comisario general de la Policía de Israel, Daniel Levy.
«Lucharemos contra todos aquellos que buscan asesinarnos y los derrotaremos» ha afirmado Netanyahu en su mensaje de condolencias a las víctimas y sus familias.
El pasado jueves, al menos 14 personas resultaron heridas en un ataque por atropello contra una parada de autobús también en el norte de Israel, en una localidad cerca de Haifa, perpetrado por un palestino de Yenín, principal foco de las redadas israelíes en Cisjordania ocupada. Una de las heridas, una chica de 17 años, fue herida en estado grave, tras sufrir graves daños en la cabeza y las extremidades.
La violencia entre israelíes y palestinos en Cisjordania vive su mayor pico de violencia desde la Segunda Intifada (2000-05) y los tanques israelíes entraron la semana pasada por primera vez en dos décadas en ese territorio, concretamente en Yenín, donde los 16.000 habitantes de su campo de refugiados han tenido que huir mientras el Ejército israelí trata de limpiar la zona de milicias palestinas.
En la dura ofensiva a gran escala que Israel comenzó en Cisjordania ocupada a finales de enero, han muerto más de medio centenar de palestinos —Israel alega que todos son «terroristas», pero además de milicianos hay también civiles— y unos 40.000 han sido desplazados de los campos de refugiados de Yenín, Tulkarem y Tubas, en el norte de ese territorio palestino.