Por Aaron Salomón, entrevista publicada en el diario Expreso
- ¿De qué trata el método Eficcop?
El método Eficcop tiene dos pilares. Por un lado, está el tema crematístico; es decir, sobornos a magistrados para que resuelvan de una u otra forma y, por otro lado, también tiene el lado político. Recuerda la Operación Valkiria, que se hace con un timing específico, y hay actores que se reúnen para hacer ese complot. En conclusión, el método Eficcop tiene que ver con coimas, pero también con complots políticos.
- ¿Cómo Marita Barreto llega a ser jefa del Eficcop?
Ella compra su puesto con un complot, donde participan dos periodistas que luego son sus engreídos: César Prado, de IDL Reporteros, y Rodrigo Cruz, que trabajaba en El Comercio y hoy lo hace en Latina. Marita Barreto se prestó para desacreditar a la fiscal Delia Espinoza y, aunque no impidió que la nombren fiscal suprema, sí evitó que la nombren fiscal de la Nación, y su amiga Patricia Benavides ingresó al cargo. Es ahí donde Benavides promueve a Barreto para hacerla coordinadora del Eficcop. Eso lo han dicho tanto Jaime Villanueva como Miguel Girao.
- Tú has señalado que el Eficcop actúa como una organización criminal.
Yo creo que, de haberse constituido como un equipo de fiscales contra la corrupción, se ha convertido en un equipo de fiscales de la corrupción. Hay varios casos que investigar. Ya la empresaria Mirtha Gonzales Yep ha salido a denunciar con una prueba contundente, como es el registro de sus conversaciones con Umberto Jara, donde se pide dinero para abrir o cerrar carpetas.
- En los audios, se escucha a Jara decirle a la empresaria que, si tú no me pagas, atente a las consecuencias, y, finalmente, Gonzales Yep no le pagó el cuarto de millón de dólares que exigía y fue detenida preliminarmente.
Como no aceptó la coima, ahora le están pidiendo de nuevo su prisión preventiva. Nosotros denunciamos esto el 17 de noviembre y, ¿qué ha hecho el Eficcop o la Fiscalía de la Nación ante la noticia criminal? Nada. El Ministerio Público, como institución, no ha hecho nada.
- ¿No existe una investigación formal contra Umberto Jara por extorsión?
No, no hay nada. Ni siquiera un fiscal provincial, de cualquier especialidad, ha abierto carpeta alguna. Es más, la señora Mirtha Gonzales Yep se reunió con el fiscal Freddy Niño, con Harvey Colchado y el capitán Carlos Martínez, quienes conocieron de la denuncia, porque ella les llevó el audio, pero han pasado casi 10 meses y no hacen absolutamente nada. Al contrario, han blindado a Jara y por eso es que Gonzales Yep dice que es un operador del Eficcop. Él se prestó para la extorsión y, obviamente, ese cuarto de millón de dólares alcanzaba para todo el mundo.
- Mirtha Gonzales Yep denunció la extorsión de Jara, pero igual la detuvieron.
Jara se lo cantó, le dijo que la iban a visitar el capitán Carlos Martínez y el fiscal Freddy Niño, quienes, finalmente, fueron a detenerla el 23 de abril, un mes y medio después de que ella denunciara que la estaban extorsionando.
- Es evidente que esos 250 mil dólares no eran solo para Jara.
Claro, porque Jara no es fiscal, él no tiene la decisión de armar la carpeta o cerrarla. El libro apologético de Jara lo escribió, ¿a cambio de qué? Hay, además, mucha información que manejaba Eficcop que se ha ido sembrando en los medios de comunicación para poder deslegitimar sus acciones. Yo creo que en esta organización criminal existe un brazo mediático también.
- ¿El libro de Jara es un elemento de prueba?
Si tú retrocedes un poco, puedes darte cuenta de que la relación de Jara y Colchado no es desde la creación del Eficcop, sino que viene de atrás. Hay temas relacionados con la Federación Peruana de Fútbol y su denuncia de parte contra Agustín Lozano, que es un impresentable, pero hay una historia detrás de esto para contar.
- Umberto Jara recibió, sin asco, 20 mil dólares de Gonzales Yep por sus servicios de “abogado”.
Sí, habría que ver bien cuánto está declarando a la Sunat, bajo qué rubro y a quién le cobra, porque una fuente me ha dicho que el caso de Andrés Hurtado, ‘Chibolín’, es muy pequeño al lado de lo que podría encontrarse si se investiga bien a Jara.
- En el reportaje de ‘Contracorriente’, no lo consideran como periodista.
No, porque un periodista no se presta para estas situaciones. Como periodista, tú te puedes juntar con Dios y con el diablo, pero tu misión única es buscar la verdad y contar bien una historia de interés público; no puedes estar ofreciendo asesorías o haciendo de lobista. Los periodistas que nos respetamos no vamos a permitir que un sujeto de estas características invada el oficio.
- La empresaria Gonzales Yep ha dicho que otros tres investigados también han sido extorsionados por otros operadores del Eficcop. ¿Se conoce quiénes son?
Nosotros conocemos por lo menos dos casos que estamos investigando. Está el del empresario Fernando Pazos, que estuvo ligado a Sada Goray, y la propia Sada Goray tiene también mucho que decir respecto a esto. Ahí también hay evidencias y audios. Esta organización está compuesta por fiscales, policías y abogados, que son los intermediarios y operadores, y ahí estaría Jara. Los mismos fiscales son los que recomiendan a estos abogados que tienen la “llave”. Estamos hablando de cosas muy serias y graves, y por eso es que me sorprende que no se investigue de manera imparcial y objetiva, empezando por el Ministerio Público, que es el llamado a hacerlo.