En una reciente aparición pública, la cual se ha hecho viral en redes sociales, el ultraizquierdista Antauro Humala ha amenazado con expropiar las empresas mineras, a pesar de los altos impuestos que pagan estas compañías, los que permiten al país seguir creciendo económicamente, sin importar siquiera la retahíla de gobiernos ineptos que venimos padeciendo después de la segunda gestión del exmandatario Alan García.
Como todo zurdo empobrecedor, el fascistoide etnocacerista pretende que el Estado –un pésimo empresario comprobado– se haga de los proyectos mineros. Esto, si nos remontamos al velascato, solo traerá más miseria, lo que favorece políticamente a Antauro, pues, como ya sentenció el guerrillero presidente de Colombia, Gustavo Petro: si los pobres dejan de serlo, no vuelven a votar por la izquierda. Es por eso que a los colectivistas no les conviene reducir la pobreza, sino que buscan mantener a los ciudadanos en la mendicidad, dándoles miserables bonos, convirtiéndolos prácticamente en esclavos del “papá Estado”.
Pero la ideología nefasta de Antauro Humala no es lo que más debería preocuparnos, ya que de la misma forma piensan otros políticos como Verónica Mendoza, sino que esté habilitado para postular a la Presidencia en los comicios del 2026, no obstante ordenó matar a policías durante el “Andahuaylazo”. La democracia no puede ser tan estúpida de permitir que un asesino de policías participe en la contienda electoral. De ser elegido, porque en el Perú cualquier analfabeto funcional puede ser presidente, Antauro Humala será el jefe supremo de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, lo que será una afrenta inaceptable para las fuerzas del orden.
Antauro, quien se levantó en armas en contra del Estado de derecho, ahora pretende ser parte de este para quebrarlo desde sus entrañas. Para tal fin, cuenta con el apoyo del cuestionado JNE, que le ha dado luz verde a la inscripción del partido de Humala, aunque lleve las siglas del asesino. Incluso, un miembro de dicha entidad declaró a un medio digital que una agrupación con las siglas del cabecilla terrorista Abimael Guzmán podría ser inscrita también. ¡Así como lo lee! ¿Necios principistas o filoterroristas de saco y corbata?
La Fiscalía ha pedido al Poder Judicial la anulación de la inscripción del partido de Antauro Humala por realizar actividades contrarias a los principios democráticos y vulnerar sistemáticamente las libertades y derechos fundamentales, al promover el fusilamiento de tutilimundi. Sin embargo, aún no hay un pronunciamiento al respecto.
En tanto, el Congreso no ha conseguido aprobar la ley para prohibir que los condenados por homicidio postulen a cargos de elección popular. Evidentemente, dicha iniciativa no fue aprobada porque Fuerza Popular anhelaba la postulación de su líder, Alberto Fujimori. Una vez muerto el patriarca de los Fujimori, no hay excusas para que el Parlamento no defienda el futuro del país. Si los legisladores presuntamente demócratas no evitan que Antauro Humala postule en el 2026, pasarán a la historia como cómplices de la eventual dictadura etnocacerista.
